La situación llegó a tal nivel que el Ministro del Interior debió desmentir rumores instalados en la propia Casa Rosada respecto a su propia renuncia. Se trata del escándalo de la ex Ciccone, donde el vicepresidente Amado Boudou aparece salpicado fuertemente y en cuya trama aparece de manera insistente el nombre de Florencio Randazzo
"Es absolutamente falso y estúpido", enfatizó el titular de la cartera de Interior al ser consultado sobre la presunta interna entre algunos sectores del Gobierno nacional, que habrían destapado el escándalo por la ex Ciccone Calcográfica.
En un acto de desesperación, Randazzo apuntó directamente contra Boldt como una de las empresas que se vieron afectadas por la "matriz" del Gobierno de Néstor Kirchner y Cristina Fernández que es "tomar decisiones contra los intereses que habían gobernado la Argentina sin ningún voto ni rostro visible en los últimos 30 años de democracia".
En ese sentido, descartó tener algún tipo de vinculación con la empresa Boldt y detalló que como ministro del Interior le quitó a esta firma la confección de las cédulas de identidad de la Policía Federal, los pasaportes y los padrones electorales. "Está claro que una de las empresas involucradas es Boldt, porque esta firma tenía enormes privilegios, que se los quitó este Gobierno. Cuando forzamos nosotros a Siemens a renunciar al reclamo que tenía con el CIADI contra la Argentina, se intentó poner como condición de que el Estado nacional se hiciera cargo de pagarles a las empresas subcontratistas de Siemens", explicó Randazzo en declaraciones a Radio Continental.
En esa misma entrevista, el ministro debió sufrir el embate del periodista Daniel López, que acompaña a Víctor Hugo Morales, quien le recordó que en 2009 la impresión de los padrones sí la había hecho esa empresa y mediante licitación directa, algo que descolocó a Randazzo. "Claro, a ver... Eh...", trastabilló por unos incómodos segundos.
Luego intentó explicar que, en realidad, en principio se iba a hacer por licitación, pero como se adelantaron las elecciones legislativas ese año, se tuvo que hacer una contratación directa para llegar con los tiempos. "Fue una situación muy particular", se excuso.
Según recuerda el sitio La Política On Line, otro negocio que también se adjudicó Boldt, y que Randazzó no mencionó es el del Censo 2010. Se trató del movimiento de papeles más grande la historia argentina, y se llevó a cabo cuando la firma todavía alquilaba la planta de la ex Ciccone Calcográfica. Durante meses, el Gobierno —sobre todo a través del INDEC, y de sus titulares Ana María Edwin y Norberto Itzcovich— repitió que había sido un gran éxito. Hoy parece haberlo olvidado.
Por otra parte, reconoció que las boleta del Frente para la Victoria las imprimió Vandenbroele, pero consideró que "decir que un funcionario es dueño de una imprenta porque ahi se imprimen sus boletas es muy poco serio".
Sobre el final de la entrevista, volvió a generarse una situación incómoda. Cuando se le volvió a consultar sobre las acusaciones que lo señalan como el responsable de haber filtrado los datos de los supuestos vínculos de Amado Boudou con Alejandro Vandenbroele, contestó: "Es absolutamente falso, estúpido y yo no creo en eso".
Su respuesta generó un nuevo silencio. "¿No cree en el hecho...?", le repreguntó el periodista, desconcertado ante las últimas palabras del ministro. "Absolutamente", remató Randazzo.
José María González