El gobierno le indicó a los medios en general que no se debía hacer mucha bulla con el valor del dólar. Así estamos el 21 de julio, (pleno cuarto semestre) con recesión y Lebacs del 26.5%.
Se terminó el subibaja de Lebacs vs dólar. Ahora aumentan los dos, y eso es un gran riesgo. Si los capitales golondrina no recompran sus dólares con ganancia, pueden salirse de lebacs para irse directamente al dolar. Vale decir que si se les mueve 6.4% el dólar, como ocurrió en este último mes, ya ni las lebacs podrían detener la espiral devaluatoria y, por ende, inflacionaria.
Mientras el consumo arrastra 19 meses consecutivos de caída (desde que asumieron), la deuda externa creció 100.000 millones de dólares (17% de incremento contra PBI, respecto de lo que dejó el gobierno anterior), la deuda externa global se acerca al 50% del PBI (y eso significa que debemos la mitad de lo que producimos por todo concepto en todo un año), y el gobierno sigue tomando deuda, sin desarrollar, ni generar empleo, ni reactivar el consumo.
La inflación de Julio ya tiene un piso del 2%, porque el dólar creció + 6.4%, y eso se fue a precios. El declamado "12% al 17% de inflación anual para 2017" otra vez pasa muy lejos del arco. Cualquier informe de inflación de julio inferior al 2% será falsa.
El panorama muestra que el campo aprieta a su propio presidente, porque lo apoya y lo financia pero es voraz en sus exigencias. El gobierno les da la mejora del tipo de cambio que le reclaman, pero el efecto inflacionario hace que todo se les licue, como al principio de este esquema absurdo, y entonces le vuelven a exigir, y lo vuelven a apretar, y así será por siempre. La del camello.
Sintetizando: Ahora se ve con mayor claridad lo que muchos dijimos desde los primeros tiempos de cambiemos. Vivimos en un estado de ajuste permanente, donde siempre, pero invariablemente siempre, los factores de ajuste van a pasar por vos. Por tu salario, por tus condiciones laborales, por tu jubilación, por tu pensión, por tus remedios, por tus precios en el mercado, por la baja de tu poder de compra, por lo que pagás en concepto de servicios, por lo que pagás para subirte a un colectivo, por lo que pagás para cargar nafta, y nunca, pero nunca, por hacer que los verdaderos sectores de gran poder económico colaboren.
Y todo esto teniendo comprados a casi todos los medios de comunicación y al 90% de los periodistas independientes, para que instalen cualquier tema excepto la realidad cotidiana, y agitando la mentira de que "los inversores no quieren venir por CFK o por el populismo o por los piquetes o por la humedad o por la parcialidad del referí Ceballos".
Aunque sea declamado como el caballito de batalla de Macri, la realidad es que al gobierno nunca le interesaron las inversiones productivas. De hecho el propio gobierno y su grupo de pertenencia (empresarial) blanquearon 125.000 millones de dólares, (de los 400.000 que tienen fugados), y no fueron capaces de hacer una sola inversión que genere empleo productivo. Ni siquiera los instaron a repatriar los capitales, y les dejaron conservarlos en el exterior.
Con 1/3 de lo que se blanqueó (Unos U$S 40.000 millones) se hubiera podido montar varios emprendimientos interesantes para la generación de empleos, y mostrarle al mundo que Argentina caminaba por la senda de la inversión productiva, como para contagiar entusiasmo.
Repito: Los que blanqueron son los mismos que gobiernan. ¿Se entiende esto verdad? Bueno. Ni se tomaron la molestia de jugar una poca de toda la que tienen. Ese blanqueo era, en realidad, apenas la compra de un certificado de titularidad legal de aquellos capitales y bienes fugados del sistema.
El inversor extranjero mira y dice "si no la ponen ellos mismos, y si Rocca se va a abrir una planta en USA, ¿qué corno voy a ir a hacer yo a ese país?". Y tiene razón.