Este miércoles la política se vio sorprendida luego de que se supiera que a Mauricio Macri se le detectó un “quiste pancreático preexistente de carácter benigno".
No obstante, pronto se aclaró que "no es necesario realizar tratamiento alguno" para tratar la dolencia.
La novedad se informó desde la Presidencia a través de un parte oficial en el que se confirmó que el resultado surgió de un chequeo médico realizado este miércoles por la mañana en el Centro de Diagnóstico Maipú, por medio de una resonancia magnética.
En el breve comunicado emitido desde la Presidencia se informó que "el presidente Mauricio Macri realizó una serie de estudios de rutina el 23 de mayo en la Centro de Diagnóstico Maipú" y una ecografía abdominal mostró la existencia de un quiste pancreático preexistente de carácter benigno.
Debe recordarse que, como publicó Tribuna de Periodistas, el 23 de mayo pasado el presidente se realizó una serie de análisis clínicos de rutina, que incluyeron un examen de sangre y de orina, una ergometría y a una ecografía general, lo cual generó todo tipo de especulaciones.
Los chequeos coordinados por el director de la Unidad Médica Presidencial, Simón Salzberg, fueron realizados en el mismo lugar, el Centro de Diagnóstico Maipú.
Anteriormente, Macri tuvo un problema en junio de 2016, que fue dado a conocer públicamente como una simple “arritmia”.