Si algo le faltaba al kirchnerismo en estas aciagas horas de dólares que fugan y subsidios que huyen, era el regreso del escándalo Schoklender-Madres de Plaza de Mayo. Es que, en las últimas horas, el juez federal Norberto Oyarbide advirtió que "no coinciden" los informes que le remitieron la Fundación Madres de Plaza de Mayo y el Ministerio de Planificación respecto de la construcción de viviendas que llevaba a cabo la entidad.
Oyarbide lleva adelante la causa principal contra el ex apoderado de Madres de Plaza de Mayo Sergio Schoklender por presuntas irregularidades en el manejo de fondos públicos que debían ser destinados a la edificación de viviendas.
"Estoy manejando toda la información que me enviaron Planificación y los propios responsables de Madres. Lo llamativo es que en algunos puntos no coinciden", advirtió el magistrado en declaraciones al diario Ámbito Financiero.
El juez federal se pronunció así luego de una inspección que encabezó en Tigre, adonde concurrió junto con "ingenieros, arquitectos y técnicos para evaluar en qué punto están las obras, su desarrollo en función del dinero entregado y de qué manera fueron retomadas", según explicó.
"La causa parece estar en un letargo, pero nada de eso; hay un movimiento increíble. Se trata de muchas personas y muchas sociedades, y también parece haber mucha habilidad operativa", remarcó Oyarbide.
Si bien se prevé que tome declaración indagatoria a Schoklender en diciembre, el juez aclaró: "Hasta tanto no tenga una valoración completa de los informes que estoy recibiendo, no voy a realizar ninguna convocatoria".
¿Habrá Justicia finalmente? La respuesta solo la tiene el juez más cuestionado de la Argentina.
José María González