El ajuste que el gobernador Daniel Peralta buscó aplicar en Santa Cruz —que incluye restricción de gastos, recorte de sueldos en un 17%, elevación de la edad jubilatoria, suspención de la contratación y pases a planta transitoria de personal, con excepción de educación, salud y seguridad— no solo generó hoy graves incidentes, sino una grave crisis institucional para el gobernador kirchnerista Daniel Peralta quien no pudo conseguir el apoyo de los diputados de La Cámpora para aprobar el paquete de leyes que mandó a comienzos de la semana a la Legislatura.
En este contexto, la quita del soporte político a Peralta a raíz de la represión contra trabajadores estatales que lograron impedir que la ley de emergencia económica se tratase en la Legislatura, quedó reflejada en una serie de renuncias oficiales.
En lo que va del día se ha sumado la renuncia del secretario de Gobierno, Francisco Anglesio; la del ministro de la Producción de esa provincia, Jaime Álvarez; la del ministro de Salud, Hernán Martínez Crespo (vicegobernador de Peralta hasta el 10 de diciembre); la del jefe de la Policía provincial, Jorge Mario Hassan; la del director de Canal 9, Martín Hernández; la del secretario de Deportes Ricardo Vaiani; y además surgió una fuerte interna entre el Ejecutivo santacruceño y la agrupación La Cámpora, que prefirió alejarse de la administración provincial.
Anglesio fue candidato a intendente de Río Gallegos este año por el Frente para la Victoria y es cercano a La Cámpora, agrupación que más temprano había anunciado la renuncia de al menos una decena de sus funcionarios, ante la grave situación.
Hassan, por su parte, había asumido el cargo hace solo unas semanas, en reemplazo Alejandro Alfredo Martín. Bajo su mando se reprimió duramente a los municipales en la crisis del 2007.
Legisladores de La Cámpora le informaron al medio TiempoSur que "decidimos no ser parte de todo esto, y confirmamos que, funcionaros de este gobierno que pertenecen a nuestro lineamiento político, dejarán a partir del día de hoy, de colaborar en el gobierno provincial".
Por estas horas se habla de que Peralta también le seguiría los pasos a los funcionarios que hoy presentaron la renuncia, y que en el día de hoy dimitiría a su cargo.
Según le señaló una fuente al sitio Opi Santa Cruz, “con esta maniobra lo que hacen es sacarle apoyo político a Peralta y ante el electorado salvan la responsabilidad política, al aparecer como que no avalan los proyectos de emergencia y de reforma jubilatoria que mandó el Ejecutivo a la Cámara, cuando hasta hace 10 horas atrás lo defendían a muerte”.
Opi indica que Máximo Kirchner y Rudy Ulloa manejan las estrategias para sacar del medio al actual gobernador y su gabinete, con el fin de hacerse del poder en la provincia. Las acciones de esta tarde dan cuenta del giro grosero que tomaron los actores de La Cámpora, desnudando sus verdaderas intenciones. Los proyectos de Emergencia y de reforma previsional fueron ordenados por Cristina y elaborados por el equipo de La Cámpora y bajado a la Cámara por Peralta.
Si bien dentro del gobierno provincial descartan la renuncia del gobernador, reconocieron que es muy difícil que Peralta pueda gobernar con todo el aparato político en contra, ya que los intendentes están muy ligados con el gobierno nacional.
Fuentes de primera línea de la provincia patagónica, le indicaron a Tribuna de Periodistas que la renuncia del gobernador K sería inminente y que Arturo Puricelli ya estaría preparando las valijas para intervenir la provincia por orden del Gobierno nacional, el mismo que redactó los proyectos de emergencia y de reforma jubilatoria.
Sin embargo, en caso de renunciar gobernador y vice, la línea sucesoria le permitirían a Mauricio Gómez Bull, vicepresidente primero y militante de La Cámpora, acceder al frente del Ejecutivo santacruceño.
Equipo de Política de Tribuna de Periodistas