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La Cámpora sigue sumando espacios de poder y de influencia en el Gobierno, pero sobre todo el Ministerio de Economía, de la mano del viceministro Axel Kicillof.
La restructuración de esa área cuenta con el aval de la propia Cristina Kirchner y tiene que ver principalmente con el desplazamiento de la mayoría de los subsecretarios y directores que llegaron con la gestión de Amado Boudou y Roberto Feletti.
La modificación que más resalta en el nuevo organigrama, es la Secretaría de Política Económica y Planificación del Desarrollo, a cargo del propio Kicillof. Allí, entre los cambios más destacados, se incorpora a las dos subsecretarías existentes (Planificación Económica y Programación Macroeconómica) las de Coordinación Económica y Mejora de la Competitividad, y la de Coordinación General. Las mismas estarán al frente por cuatro compañeros de la agrupación de la cual forma parte Kicillof y que trabajaron con él en CENDA: Federico Maronqui, Augusto Costa, Nicolás Arceo y Emmanuel Álvarez Agys.
Según señala El Cronista, la novedad es que estos nuevos subsecretarios —a quienes dentro del ministerio se los llama “Los Cuatro Fantásticos”— solo tienen contacto directo con el ministro de Economía, Hernán Lorenzino, y con el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno.
Por supuesto, los nuevos cargos no cayeron muy bien en el ministerio, ya que se les recrimina desde puestos más bajos que “Los Cuatro Fantásticos” no tienen ningún vínculo con la línea y que desconocen totalmente cómo funciona esa cartera. “En ciertos casos nos ignoran y en otros nos ponen directamente un economista de ellos arriba nuestro, como ocurre en varias direcciones nacionales para que no hagamos nada”, le comentó un técnico que pertenece a una de las subsecretarias a ese matutino.
El auge de nuevas subsecretarias y direcciones nacionales a cargo de jóvenes economista de la agrupación kirchnerista, no significa otra cosa que la búsqueda de mayor planificación, programación económica y control sobre las empresas del sector privado, a través de un análisis de los ingresos, costos, salarios y rentabilidad de las empresas privadas.
Hay que recordar que tanto Costa como los restantes subsecretarios Emanuel Agis, Nicolás Arceo y Federico Maronqui pertenecen al CENDA, que hasta el inicios de la gestión de Kicillof en Economía, fue uno de los centros ligados al oficialismo que cuestionaban las cifras del Indec.
Hace un mes, la Directora Nacional de Proyectos con Organismos Internacionales de Crédito en el Palacio de Hacienda, debió abandonar el ministerio por el pedido del viceministro. Dicha área representa una importante caja del Estado que pasó a controlar Kicillof en su totalidad, que junto a Guillermo Moreno, van opacando a un Lorenzino casi mudo.
