Para algunos, las polémicas declaraciones del ministro de Interior Florencio Randazzo, causaron sorpresa. Fue al ser consultado sobre posibles vínculos comerciales entre la exCiccone Calcográfica y el vicepresidente cuando dijo "No pongo las manos en el fuego por nadie", porque había que esperar un pronunciamiento de la Justicia.
Sin embargo, para otros la frase de Randazzo no fue más que una confirmación del alejamiento de esa cartera que ya hace tiempo viene sonando.
Y es que esas declaraciones sobre el Boudougate hicieron bastante ruido en el seno del kirchnerismo, tanto que, según cuenta Noticias Argentinas, en el último acto de la Presidenta y, mientras diversos funcionarios charlaban como de costumbres mientras esperaban las palabras de la mandataria, Florencio Randazzo estaba abstraído, ignorado y sin participar del diálogo con sus compañeros. El ministro del Interior venía de realizar las afirmaciones que sonaron en los medios durante toda la semana y desde ese momento que la situación del funcionario se tornó más delicada.
Por estas horas, suena con más fuerza la posibilidad del desplazamiento de Randazzo, a la vez que el nombre de Nilda Garré para encabezar esa dirección. De ser así, el Ministerio de Seguridad quedaría en manos de Sergio Berni, recientemente designado como número dos de Garré. Según comentan en Casa Rosada, el cambio sería después de las Pascuas.