Un personaje allegado a Prensa y Difusión del gobierno a quien conocemos desde hace años, nos ofreció una revelación interesante. Obviamos decir de quién se trata para resguardar su trabajo en la función pública, pero cuando le preguntamos hace unos días sobre el nombramiento de Javier Romero en la dirección periodística del multi medio que le compró Cristóbal López a Daniel Hadad, nos respondió: “¿Vos creés acaso que un tipo pulcro como Cristobalito va a darle la dirección de todos los medios a un pibe cuyo único antecedente es haber servido de cadete periodístico al enano de Morón? (se refería a Martín Sabbatella, el ex intendente que financiaba la publicación de un periódico dirigido por Romero, donde lo glorificaba como si hubiera sido el reconstructor de la Alemania de pos guerra)”.

En el gobierno —aunque salvo alguna excepción como Luis D´Elia nadie lo dice en público—, a Sabbatella le tienen bastante desprecio. Lo ven como a un posible Daniel Scioli, un traidor serial que alguna vez estuvo al lado de Juan Carlos Rousellot hasta que por el escándalo de las cloacas del partido de Morón el ex locutor y político cayó en desgracia y al momento de destituirlo levantó la mano a favor de su caída.

Un peronista histórico que fue interventor en Radio Belgrano, Radio Municipal y ATC-Canal 7, Horacio Frega, nos dijo hace horas: “Si el hijo de Rousellot que vive en Miami se atreve a contar la historia de Sabbatella haciendo de cadete de Rousellot, se conocería toda la verdad de este personaje”.

El antecedente de Romero fue ése, y aquel libro pobre y desinformado que contaba la supuesta biografía de Daniel Hadad.

Y lo suyo en Duro de Domar haciendo de “profesor” detractor contra Clarín y La Nación es casi lo mismo que hacía Sabbatella cuando se enfrentaba con Scioli. Algo bajo y nefasto.

Entonces le dijimos a nuestro hombre en la Rosada: “¡Pero Javier Romero llegó a asumir por unas horas en Radio 10!”.

Y el hombre contesta: “¿Pensás acaso que López que gusta del buen vino y la vida hedonista elegiría para su medio a un tipo que toma vino en tetra brick y anda con los zapatos sucios siendo que tiene condiciones económicas para estar mejor?”

“Traducimelo”, le pregunto.

Y la respuesta que nos dejó helado: “Fue todo un globo de ensayo, una operación de prensa que armó gente de la SI (SIDE). Le pincharon los teléfonos a algunos de los referentes del multimedio para saber las respuestas y el comportamiento de muchos que trabajan allí. El gobierno quería reconocer aliados y traidores. Cuando se mencionó públicamente que Javier Romero tomaba la conducción de las radios y la señal de C5N, todos hablaron y opinaron y ya se sabe quién es quién en la emisora. Dos días de convulsión alcanza para medir el panorama de lo que se va a encontrar Cristóbal López cuando asuma su función”.

Para finalizar, algo impávido le preguntamos: “¿Romero estaba al tanto de la engañifa?”

“Ni en pedo, no le da la cabeza para entenderlo y hubiera arruinado el globo de ensayo. El gobierno perdió un peón para defender a la reina, la inteligencia es a veces como el juego del ajedrez, hay sacrificios que son necesario hacerlos para salvar la partida”.

Nos vino a la memoria cuando el uruguayo Tavares fue director técnico de Boca Juniors.

Le decían como a Romero: “El profesor”. Después de algunos partidos que Boca no ganaba, la tribuna coreaba: “El Profesor, el profesor… se a va la p… que lo parió”.

Parece ahora que el kirchnerismo le canta lo mismo a Javier Romero.

Jorge D. Boimvaser