En manos de una sonriente banda corruptos parece estar la pesca argentina. Unos enriquecidos administrando recursos públicos que traspasan a manos privadas, y otro enriquecido estafando a sus afiliados. La corrupción es efecto, no causa.
Según palabras del político y abogado peruano, Enrique Ghersi, “No hemos entendido qué es la corrupción. Generalmente la tomamos como una causa, cuando es un efecto. Este elemento es capital para poder entender la lógica de los sistemas corruptos. Todos nos preocupamos por el problema pero creemos que lo que ocurre es que, como somos demasiado corruptos, no funciona el sistema, no funciona la democracia, no funciona la ley, cuando es exactamente al revés. Como no funciona el estado de derecho, como no funciona el sistema institucional, se produce la corrupción como una alternativa para que la gente pueda desarrollar sus diferentes actividades económicas.
La corrupción, es un efecto y no una causa. Es un efecto del alto costo de la legalidad. Mientras no lo veamos así, podemos llenarnos la boca con fórmulas retóricas y con condenas más o menos generales, pero nunca produciremos instituciones más honestas. Este error de percepción deriva de otro menos frecuente: creer que las leyes son gratuitas, que el derecho es neutral”.
CV de algunos personajes hoy impunes
Néstor Miguel Bustamante es subsecretario de Pesca, abogado y lobista de empresas pesqueras. Fue nombrado en el cargo por su llegada al núcleo de armadores asegurando mayor caja al poder. Facilita la pesca sin dispositivos de escape de juveniles, que continúe la mafia del Sindicato de Marineros de la Pesca (SIMAPE) —sin personería y que solía recaudar para Felipe Solá— a cargo de las fiscalizaciones pesqueras de muelle e inspectores embarcados. Así, protege una caja ilegal de US$ 600.000 al año. Además, permitió reemplazos de buques por otros de mayor potencia de captura aumentando el esfuerzo pesquero.
Detrás de su escritorio tiene el listado de los permisos de pesca de cada buque del mar argentino y el porcentaje de permiso con el que cada uno pesca. Esa información no es pública, si bien debería estar en la web para su acceso. Aparentemente, los controles, al Dr. Bustamante no le agradan. El ocultar información llena las billeteras.
Norberto Yahuar, impulsor junto a Néstor Kirchner de la mayor enajenación petrolera de la Argentina a manos del Grupo Bulgueroni. Por su gestión se motorizó el contrato firmado 10 años antes de su vencimiento a Pan American Energy (PAE) y por 30 años más, hasta “agotar el yacimiento”, como dice textualmente el acuerdo. Con la pesca la cosa es idéntica. Las auditorías de la AGN elevadas a la Comisión Bicameral expresan año a año el grado de corrupción de la Subsecretaría de Pesca.
El pago de coimas por el recambio de buques es vox populi en los muelles desde hace décadas. No bien asumió como Subsecretario de Pesca en el 2008, reunió a los armadores y dijo: “El cajero de Néstor soy yo”. Al asumir, dio de baja el uso de dispositivos de escape de juveniles.
La Resolución 5/2010 firmada por el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca publicada en el Boletín Oficial del 21/01/2010, autorizo a Yahuar a firmar un “Acuerdo de Cooperación sobre Pesca” entre China y la Argentina. Ese fue el ingreso a la entrega del mar argentino a la flota china, permitiendo la pesca del calamar en aguas nacionales a cambio de una gran suma de dinero.
Esta política genera dumping debido los costos chinos sobre los argentinos. Los armadores no protestan ya que son parte del charteo de buques extranjeros. Dicha matriz se la visualiza en cada resolución que parece suplantar a la Ley Federal de Pesca 24.922, y que ningún jurista cuestiona.
El comentario de cuántos dólares de coima se pagan por tonelada que les otorga el Estado a los armadores, es tema de conversación en el café “Gianelli” del puerto de Mar del Plata, donde los armadores hablan a los gritos delante de cualquier pareja joven que no les inspire desconfianza y estén con un mapa de la ciudad sobre la mesa.
Jorge Frías, secretario de la Asociación de Capitanes y Patrones de Pesca, y amigo del autor ideológico del crimen de Mariano Ferreyra, José Pedraza. Semanas atrás traicionó a sus afiliados firmando un acuerdo salarial sin consenso.
Los números de su administración hacen agua como el Titanic. Por ejemplo, los aportes de las facturas que generaron gastos exorbitantes durante el año pasado. El más curioso son los 170 mil pesos de gastos en concepto “combustibles y lubricantes” que figuran en el informe contable. También percibía honorarios suculentos por ser Presidente de una mutual que los afiliados desconocían. “Desde la ACPA todavía esperan a que Frías responda sobre los nombres de los oficiales que han sido becados el año pasado y que generaron un gasto de 200 mil pesos, según consta en el balance. Tampoco recibieron información satisfactoria sobre los más de 100 mil pesos que gasta la Asociación en una Mutual que nadie entre los trabajadores activos conoce”, contó oportunamente Revista Puerto.
Esto, si se quiere, se lo merecen los afiliados. Son quienes lo perpetuaron en el cargo aun habiendo en la gestión anterior la compra de una farmacia a sus espaldas y con su dinero, utilizando esta como “farmacia social”. Cuando se difundió el secreto, comenzó la polémica, ofrecieron reintegrar el dinero y hasta apareció un cuchillo y heridos.
Hoy, la lista contraria encabezada por Jorge Ojeda comete un fallo garrafal al apoyarse en el kirchnerismo para eyectar a Frías, olvidando que los gremios deben luchar por sus afiliados sin intervenir en componendas coyunturales con políticos, pues luego viene “el pase de factura”.
Hay mecanismos legales para que Frías deponga el cargo: el inicio de una investigación patrimonial profunda e indagar cuentas off shore de él, el tesorero y allegados. ¿Que hizo la comisión revisora de cuentas? Un sindicalista marítimo gana el mejor salario del buque de mayor producción que opera en el mar argentino. ¿Cómo pueden volverse millonarios empresarios con un salario por más que sea el mejor de la flota? Esto, ni la AFIP ni la UIF lo investigan.
Concluyendo
No solo la pesca argentina que es un recurso alimentario, al igual que el agua en breve valdrá más que el oro. Está en manos de personajes que no tiene plan alguno, ni a mediano ni largo plazo, más que robar en sociedad administrador-administrado.
Hasta ahora han sido capaces hasta de permitir a una potencia como China ingresar al caladero sin control alguno. ¿En cuánto se beneficia la Argentina con esta entrega y en cuánto las cuentas de los funcionarios? Todo esto está en consonancia con una política nacional, sindical y empresaria de funcionarios que en durante años se enriquecieron como jamás lo podrá hacer un trabajador común en dos vidas seguidas.
La oposición tampoco tiene idea de cómo controlar o revertir la situación, más que correr detrás de la agenda K. La modificación a la Ley Federal 24922 que establece quitas de las licencias de pesca a empresas que pesquen en Malvinas y el continente, sirvió para agrandar la caja y nada cambió. ¿Eso la oposición no lo ve o cobra por callar?
El Gobierno lleva ventajas abismales con personajes como Amado Boudou, Julio De Vido, Ricardo Echegaray o Mariano Recalde, a quienes llenos de impunidad, nada les importa. La Presidenta, al igual que el Gobernador de la provincia de Buenos Aires, se remite a defender la salida de presos de las cárceles. La ciudadanía no compró en el Calafate tierras a precios ridículos, no gasta 2 millones de dólares por día en aerolíneas, ni compra pisos en Puerto Madero. Gastos reservados solo para políticos, banqueros, empresarios del poder, sindicalistas del poder, jueces con anillos y gustos exquisitos que son capaces de autorizar cualquier salida.
Detrás, un pueblo lleno de inseguridad y hambre. Entonces, a todas luces denunciar el vaciamiento y entrega del mar argentino y sus recursos es una nimiedad, pues es otra caja que no parece ser resignada por nada ni por nadie. ¿Existirá un juez que se anime a decir “basta”? En la Argentina, cada vez está más claro que los verdaderos delincuentes no están en la cárcel sino en el poder.
Roberto Maturana
Oficial de Marina Mercante-Investigador