La inversión de recursos públicos para promover el acceso a servicios de agua y saneamiento no se está logrando, pese a la enorme masa de subsidios que desde el Tesoro nacional se le asigna a Agua y Saneamientos Argentinos (AySA).
Es que no solo gran parte de esos recursos son usados para sostener el congelamiento de la tarifa a la población con alto poder adquisitivo, sino que la cobertura se limita a la Ciudad y el Gran Buenos Aires, discriminando a los que viven en el interior del país.
Luego de un reciente informe de IDESA, el cual indicaba que Aerolíneas y AySA cuestan casi como la asignación por hijo, esta última empresa envió una nota a dicho instituto donde confirma que en el año 2012 AySA recibió del Tesoro Nacional $5.491 millones, y agrega que absorbió un total de $11.560 millones en los últimos años. Según la empresa, eso permitió ampliar la cobertura a 303 mil hogares en la red de agua potable y 221 mil hogares a la conexión de cloacas. La nota también afirma que sólo el 10% de los usuarios de la región metropolitana han dejado de percibir subsidios.
Sin embargo, el descargo confirma lo que señala el Informe de IDESA: una parte importante de los recursos fiscales son usados para subsidiar la tarifa de agua y cloaca de las personas que viven en Buenos Aires.
“Invertir en conexión a la red de agua potable y cloacas es una acción en la dirección correcta. Sin embargo, no alcanza para justificar los subsidios a AySA”, expresa IDESA.
Un indicio del regresivo impacto de estos subsidios surge al comparar la evolución de la tarifa en distintas áreas geográficas. Por ejemplo:
-El 90% de los usuarios de la Ciudad y Gran Buenos Aires al que no se le retiró el subsidio –según señala AySA–, nunca tuvo ajuste de tarifa.
-En la Ciudad de Córdoba, la tarifa de agua se multiplicó, en promedio, por 3.
-En el interior de la Provincia de Córdoba la tarifa se multiplicó, en promedio, por 3,6.
Los datos muestran que el congelamiento de tarifas en la región metropolitana significa un privilegio no extendido a todos los habitantes del país. De hecho, los cordobeses, pagan entre 3 a 4 veces la tarifa que tenían hace 10 años atrás, mientras que los porteños pagan la misma.
“Semejante asimetría solo se puede explicar por los subsidios que recibe AySA del Tesoro Nacional y que no reciben los proveedores de agua y saneamiento del interior del país”, indica IDESA.
En la actualidad, el subsidio a AySA y la inversión realizada por la empresa en el Gran Buenos Aires es insuficiente.
Según datos del Censo 2010, el 33% de los hogares (más de 900 mil) no tiene agua de red y el 59% (1,7 millones de hogares) no tiene cloacas.
“Bajo ningún criterio de racionalidad ni equidad se justifica usar fondos públicos para congelar la tarifa de la Ciudad cuando el Gran Buenos Aires sufre tamaña precariedad sanitaria”, dice el informe.
“Los subsidios no deben dirigirse a las empresas, sino a la cuenta de las familias pobres para cubrir parte de su tarifa. De esta forma, la población financia la inversión y el gasto corriente del servicio y los fondos públicos se focalizan en la tarifa social”, agrega.
Aquí el informe completo.