Para comprender el estado de la adopción como un derecho del niño en Argentina, es importante analizar primero, qué es lo que piensa el gobierno nacional de sus niños. Para desentrañarlo citemos tan sólo dos aspectos que dibujan con absoluta precisión la filosofía que ha imperado en estos 10 últimos años en la protección social de los más pequeños:
“La legisladora oficialista Diana Conti logró la aprobación por parte de la Cámara de Diputados de la Nación de su proyecto para restaurar en el Código Penal la figura del Infanticidio. Dicha propuesta en estos momentos viaja hacia Senadores para convertirse en ley, mediante la cual una mujer puede matar a su hijo recién nacido sin ser condenada, siempre y cuando la ejecución se produzca entre el momento del parto y los 40 días subsiguientes”.
Este caso muestra de una manera contundente la diferencia entre bebés y niños por lo despiadado del hecho criminal del infanticidio contra los seres más vulnerables de la especie y porque el oficialismo no ha pergeñado, al menos hasta ahora, una ley mediante la cual esa misma mujer pueda exterminar sin ir presa a su hijo de siete años.
Este es el concepto que ha reinado en el gobierno nacional desde su ingreso al poder en el año 2003, y el que ha irradiado el espíritu del proyecto de modificación de la ley de adopciones hecho ley por los legisladores oficialistas, en absoluta soledad hace unos días. Para comprender mejor este segundo aspecto analicemos cómo administra esta política otro aspecto de protección de los recién nacidos:
“La actual ley de adopciones (24.779) efectúa entregas legales de recién nacidos (0 a 1 año) tan sólo en un 25%. El resto, el 75% corresponde a circulaciones a través de transacciones comerciales administradas por un mercado paralelo a cargo de mafias conformadas por la asociación de delincuentes comunes con funcionarios públicos, que operan en tres polos territoriales dentro de la República Argentina con conexiones internacionales”.
En orden a ello resulta claro, que las modificaciones recientes sobre la ley de adopciones, tan sólo impactarán sobre ese porcentaje, el 25% de los casos (o de esos bebés) ya que el resto, repito, el 75% (de los otros bebés) están fuera del control del Estado y pertenecen en exclusividad a sectores mafiosos cuya moneda de permutación es la impunidad a cambio de coimas.
La reforma reciente a la ley de adopciones no provocará ningún cambio beneficioso para nadie.
1) Los trámites para adoptar no serán más rápidos ya que la tardanza esencial nunca estuvo relacionada con la burocracia de la ley como distractivamente lo publicitó el gobierno, sino con que cada vez llegan menos bebés a los Juzgados para ser dados en adopción, en razón de la actividad mafiosa que triplica en importancia a la oficial.
2) La proficua labor de las organizaciones mafiosas están haciendo desaparecer al instituto jurídico de la adopción en Argentina, Latinoamérica y Europa como modo civilizado de prohijar, reemplazándolo por la violencia de la apropiación de hijos de madres pobres y en estado de vulnerabilidad.
3) La colaboración de la iglesia católica en el negocio de la apropiación ha sido imprescindible y ha sido sumamente eficaz e infalible por cuanto le ha sustraído al niño la adopción como un derecho propio, entreverando al recién nacidos como objeto para prácticas caritativa entre sus fieles. El sello inocultable fue el paradigma que justificó doctrinariamente el robo de bebés por parte de sus miembros y laicos obsecuentes, mandato éste que justificó cualquier brutalidad, cuando dijo: “Los niños se crían mejor con familias pudientes”, cuando en realidad se crían mejor con sus padres.
4) El mercado negro, que acapara el 75% del negocio de la apropiación tiene mejor oferta y por ello es más competitivo que el oficial en el cuál las esperas son y continuarán siendo interminables.
Competitividad insuperable de las ofertas mafiosas para la adquisición de un recién nacido frente a la propuesta oficial de la adopción
a) Rapidez: Se puede obtener un bebé realizando un viaje de una semana a cualquiera de los 3 polos de compra-venta que existen en Argentina.
b) Elección personalizada: Las zonas infectadas por estas mafias poseen poblaciones cautivas conformadas por un crisol de razas que permiten la elección de las criaturas, en donde la tez blanca, los ojos claros o el sexo determinan el precio. Los menos onerosos son los de tez oscura, los llamados pelito duro y los discapacitados que también forman parte de la oferta. El precio de las nenas de tez morena puede incrementarse si son adquiridas por el narcotráfico para ser utilizadas como mulas por su mayor capacidad genital de carga.
c) Sin burocracias: En el precio final se puede convenir la entrega del bebé con o sin papeles lo que puede incluir: certificado de nacido vivo o partida de nacimiento, documentos éstos últimos que comúnmente son adquiridos por los extranjeros para burlar los controles de Gendarmería Nacional al momento de abandonar el país.
d) Envíos a domicilio sin costo adicional: Las distintas modalidades de apropiación pueden incluir el traslado de la embarazada para parir en la ciudad de origen del comprador o la entrega domiciliaria del recién nacido, sistemas éstos muy utilizados por cuanto garantizan la seguridad del adquirente y aleja territorialmente el episodio ilícito del grupo mafioso de origen donde se provocó la venta.
e) Sin impuestos ni presión fiscal: La evasión impositiva está garantizada por supuesto, a pesar que para los extranjeros los pagos por bebés pueden ser en dólares o euros, monto éstos que se encuentra regulados de acuerdo al destino desde donde la criatura sea requerida. Los pagos más importantes provienen de la industria de la pornografía infantil.
f) Sin costo de honorarios profesionales: Los sistemas mafiosos poseen en estas zonas profesionales asociados que aconsejan sin cargo a los adquirentes sobre cualquier duda que tengan respecto del producto adquirido.
g) Garantía del producto: Los bebés se entregan con “garantía” sobre la procedencia, salud, higiene y nutrición controlada durante los 9 meses inmediatos anteriores a la compra.
h) Incluye hotelería y pensión completa: Se puede convenir en el precio final la inclusión de este tipo de gastos para dos personas en el polo de venta, por el tiempo que demora la entrega.
i) Con acceso al parto: Cuando los partos se producen en las habitaciones de los hoteles adheridos al sistema, con un pequeño plus puede asistir al parto para vivir las emociones y la experiencia irrepetible del nacimiento de su producto, casi como si usted mismo lo hubiera parido.
j) Fácil regreso a casa: Está garantizada la salida rápida y cómoda de la zona con el nuevo producto tanto para el nacional a través de rutas provinciales, nacionales o pistas clandestinas sin radarización para el extranjero al servicio las 24 horas para la industria.
Mientras esto ocurre y la mafia de la compra venta de recién nacidos convive pacíficamente con el sistema oficial, ningún poder político, social, económico ni religioso, ni siquiera por caridad se ha mostrado interesado en terminar con esta desgracia humana. Nadie habla de lo que usted acaba de leer lo que hace aparecer este relato como producto de mi fantasía personal, que para colmo, ni a dios pareciera interesarle.
Julio César Ruiz
Fundación Adoptar