Es curiosa la carta de Juan Bruno que me llegó esta semana, referida a una nota que cuestiona al periodista Diego Brancatelli, alineado al kirchnerismo. Dice textual la misiva:

Estimado señor Marcelo Suarez, esperaba que nunca llegara el día en que debería escribirle una carta dentro de la sección Defensa del Lector pero lamentablemente me veo obligado a hacerlo concretamente sobre un artículo publicado el día 8 de enero del señor Alexis Montefiore titulado: "Brancatelli, el periodista K más odiado de la TV" en donde, como imagen de portada de dicha noticia, se apela a utilizar un insulto extraído de un tuit al azar y se citan varios tuits de personas al azar que lanzan toda clase de improperios hacia Brancatelli de forma violenta.

Considero que esta nota en particular, además de irrelevante para el común denominador de la gente que desea informarse sobre noticias de relevancia en materia de economía, política y actualidad social, arremete con un halo de violencia verbal innecesaria descalificando al periodista que trabaja en el programa Intratables cuando se menciona que: "No es un profesional muy preparado y el único antecedente que se le conoce es como prensero de Larry De Clay, que trabajaba con Marcelo Tinelli".

Es una autentica falta de respeto hacia Brancatelli y hacia su rol de periodista ya que tiene una extensa trayectoria como periodista deportivo, así también como docente en la UNLZ.

La verdad que se me había pasado y nunca vi publicada la nota que menciona el lector. Ahora que la he leído coincido en un todo con su queja.

Por empezar, los improperios violan el punto 1.7 del apartado “Principios éticos” del Manual de Estilo de Tribuna de Periodistas. Allí se asegura que “los artículos que produzca y emita no acepta frases que puedan constituir ofensas o insultos deliberados a los particulares ni a las autoridades constitucionales”.

A su vez, el punto 2.4 del apartado “Tópicos periodísticos”, insta al periodista que escriba para Tribuna de Periodistas “a tener particular cuidado en el tratamiento de informaciones sobre hechos que puedan tipificar el delito de injuria”.

Este es un sitio que insiste en automencionarse como honesto e independiente, y debe demostrarlo en los hechos, no solo en los rótulos.

No necesito escuchar las excusas que pueda darme el autor de la nota, es imposible defender su postura. Sí lo invito a reflexionar y no volver a cometer el mismo error.

Agradezco que me escriban, como siempre lo hacen, y los invito a contactarme a mi correo electrónico ombudsman@periodicotribuna.com.ar.