"Un sector mayoritario de la justicia federal está jugando en contra del Gobierno. Es muy probable que dentro de 15 días Bonadío cite a indagatoria a Lázaro y a Máximo por Hotesur y los tenga procesados hasta que defina la Cámara".
La predicción no es nueva, pero pertenece a un hombre jugado a la continuidad del oficialismo que otea un panorama electoral complicado por la pelea cada vez más profunda entre la administración nacional y un sector del poder judicial.
Un legislador perteneciente a La Cámpora directamente le puso fecha: “Bonadio lo llama a Máximo Kirchner a indagatoria el 20F, deslizó”.
La frase, dicha con pesadumbre, surge casi calcada de la boca de un importante parlamentario con llegada cierta a la mandataria. Y la información es confirmada por un intendente del Conurbano de aceitada relación con “La Cámpora”, consigna un informe publicado por el matutino Clarín. La indagatoria a Máximo sería por la causa Hotesur, pero trascendió que Bonadio se tomaría un tiempo para citarlo.
Con todo, en el Gobierno manejan como fecha concreta el “20 F”. La posibilidad de imaginar la cara de la Presidenta viendo los diarios del sábado siguiente con la foto de su hijo subiendo las escalinatas en Comodoro Py altera los nervios de todos. Algunos funcionarios unían la divulgación de advertencias anónimas recibidas por el juez: Bonadio denunció que recibió un recorte con amenazas.
El caso Hotesur alcanza no sólo a Máximo, sino también a su hermana Florencia Kirchner y a la Presidenta, todos ellos accionistas de esta empresa administradora de hoteles. Los Kirchner están directamente vinculados con el empresario Lázaro Báez, quien alquilaba las habitaciones de esos hoteles -por valores millonarios- a través de sus empresas; allí se investiga la ocupación falaz de esas residencias, lo que implicaría un eventual lavado de dinero.