El 30 de abril de 2016, diario La Nación publicó uno de sus periódicos informes acerca de la investigación Panamá Papers, anoticiando que la familia política del Secretario General de la Presidencia, Fernando de Andreis, aparecía con actividades en sociedades offshore panameñas, vinculadas al estudio Mossack Fonseca.

Hay que aclarar que Fernando de Andreis, además de ser el Secretario General de la Presidencia, es el ahijado y ex cuñado de Mauricio Macri, en tanto hermano de crianza de su primera esposa Ivonne Bordeu.

El equipo del periodista Hugo Alconada Mon informó que la firma "Parquemar Group S.A.", radicada en Panamá, en cabeza de tradicionales prestanombres, le otorgaba a 5 miembros de la familia Asconapé, (entre los que se encuentra la esposa de De Andreis, Maria Sol Asconapé), un "poder" general, para administrar la sociedad.

Esta es una de las mecánicas habituales de conducción de las empresas offshore para fuga y lavado de activos.

El verdadero dueño compra una sociedad previamente constituída, y los prestanombres que figuran en el directorio le extienden poderes absolutos para operar, especialmente para la operatoria bancaria por el mundo, tal como ya lo viéramos oportunamente con el caso de Néstor Grindetti, y la firma "Mercier International", a cuyos titulares Grindetti dijo desconocer, pero que le extendieron poderes para abrir y manejar cuentas en bancos suizos...

La familia Asconapé, entre otros asuntos, aportó fondos a las campañas de Mauricio Macri en 2014 (precampaña) y 2015.

Aunque se conocen vínculos previos entre las familias Asconapé y Macri.

Se remontan a un escándalo acontecido hacia 1994, cuando el gobierno de Carlos Menem desguazó terrenos ferroviarios linderos a Barrio Parque, y se los adjudicó por contratación directa y a precio vil (500 dólares el metro cuadrado, cuando el mercado los cotizaba en unos 6000 dólares) a los propietarios de viviendas linderas. En ese momento, extendieron sus propiedades algunos conspicuos vecinos porteños vecinos como Martín Asconapé, y el hermano de Mauricio Macri, Gianfranco Macri, que duplicó la extensión de su propiedad.

No es antojadizo colegir que el lazo entre Fernando de Andreis y su esposa, María Sol, bien puede ser fruto del vínculo preexistente entre las familias Macri y Asconapé.

Martín Asconapé, el suegro de Fernando de Andreis, es un empresario inmobiliario de vasta trayectoria en la Argentina, aunque, tal como demostraremos, su actividad offshore no es menos atractiva.

Porque cuando acudimos a mirar los datos de la empresa mencionada por la gente de Alconada Mon, "Parquemar Group S.A.", nos encontramos con un nombre bastante conocido: Gustavo Larriera.

Gustavo Federico Larriera Mendivil, que aparece como director y presidente de la empresa de los Asconapé, también es miembro (entre varias otras) de otras dos sociedades offshore que tienen estrechos vínculos con la política argentina: “Sevel International Inc”, y “Latin American Assets Management Group S.A”. Ambas , claro, radicadas en Panamá.

Copia de acta de "Latin American Assets", con Larriera

“Sevel International Inc” salta a la luz por razones obvias; no hacen falta ulteriores explicaciones, sino decir lo evidente: Aquí también aparecen los lazos entre Macri, Larriera, y Asconapé.

Pero “Latin American Assets Management Group” (es decir, Larriera) es una de las sociedades que el fiscal José María Campagnoli detectó como aportante de fondos a “Austral Construcciones”, de Lázaro Báez, a través de la ya célebre “Helvetic Group”, y que también se encuentra vinculada al asunto “Ciccone Calcográfica” y “The Old Fund”, via “Dusbel S.A”.

Lo que tenemos entonces, hasta aquí, es un nexo de operatoria financiera offshore entre la familia del Secretario General de la Presidencia, SEVEL (que es Macri), Austral Construcciones, y Ciccone Calcográfica.

O, dicho de otra forma: Entre Macri, DeAndreis, Báez, y Boudou.

Pero esto no es todo. Porque el amigo Gustavo Larriera también maneja a la empresa uruguaya “Holmen SA”.

La misma empresa que, sin tener actividad en la República Oriental del Uruguay, es propietaria del 30% de las acciones de “El Tehuelche S.A”, que regentea la cadena de hipermercados “Hipertehuelche” cuyo dueño (entre muchas otras empresas), en Santa Cruz, es el diputado radical Eduardo Costa, esposo de la dirigente de la Coalición Cívica Mariana Zuvic.

Breve tiempo después del estallido económico de 2001, la firma “Holden S.A.” aportó 2 millones de dólares a la empresa de Eduardo Costa, y se constituyó en accionista de “El Tehuelche”.

Adicionalmente a todo esto, recientemente el diputado porteño Gustavo Vera presentó una denuncia contra la Nº2 de la Secretaría de Inteligencia, la ex diputada PRO Silvia Majdalani, responsabilizándola por presunto lavado de dinero.

Vera vincula a Majdalani precisamente con Gustavo Federico Larriera Mendivil, como integrante de tres sociedades anónimas: “Paraná SA de seguros”, “Organización Hotelera Ocean Park SA” – o “Acuíferos Ocean Park SA”– y “CFC Holding SA”, la que se incorporó a “CFC Group Sociedad Extranjera”, que se encuentra inscripta precisamente a nombre de Larriera Mendivil.

De modo tal que los vínculos de operaciones se extienden aún más, y ya nos linkean a Macri, con De Andreis, Majdalani, Lázaro Báez, Boudou, Eduardo Costa, y Mariana Zuvic. Pero aún hay más.

El equipo de Alconada, en La Nación, informa que los mails de Mossack Fonseca a los que tuvieron acceso indican que Martín Asconapé, el suegro de De Andreis, también es accionista de “Cumberland Equities” junto a otros seis argentinos, a saber : Guillermo García, Oscar Alejandro Zarich, Alberto Valdez, Ricardo Moreno, Roberto del Río Ortúzar y Pedro Eugenio Reynal.

Pedro Eugenio Reynal era el titular de “MBA Compañía Financiera S.A.” sociedad encargada de manejar fondos ilegales de la dictadura militar de 1976, junto a su hijo Alejandro Reynal, vicepresidente del banco central de José Alfredo Martínez de Hoz. Dicho de otro modo: Otras cabezas del robo y fuga de capitales más severo de la historia argentina, algunas de cuyas características y ramificaciones ya detallamos en nuestra anterior nota “Una de Piratas”.

Y “Cumberland Equities” aparece como apoderada y accionista de “Constanza Holdings” (Panamá), quien a su vez controla otras 6 firmas. Y que extendió su alcance a “Lakky Holding Ltd”, una offshore radicada en las Islas Vírgenes Británicas, cuyo director es el mismo Roberto del Río Ortúzar, ex funcionario de la antigua DGI, y socio de Asconapé en “Cumberland”.

Y, nuevamente merced a la información de Alconada Mon, nos enteramos que Martín Asconapé y Roberto del Río Ortúzar, son socios en el emprendimiento local “Chacras de la Cruz S.A.”, que es el mismo lugar donde la diputada Elisa Carrió (mentora y socia política de Mariana Zuvic), construyó hace unos años su tan promocionada casa sin techo.

Carrió compró el lote 261 de Chacras de la Cruz el 29 de febrero de 2012. Según consta en el boleto de compraventa que ella misma publicó en su web, pagó 49.000 dólares a la empresa “Urbaland Argentina S.A”, sede local de una sociedad creada en Panamá cuyo principal accionista es Martín Mariano Asconapé: El suegro de De Andreis, y socio de Gustavo Larriera, el financista de Costa, Zuvic, Lázaro, y Boudou.

Cuesta muchísimo creer que se trata de una casualidad que Carrió compre su terreno a un socio del financista de Mariana Zuvic. Pero más curiosidad despierta advertir que, a su vez, Larriera pone su nombre en otra offshore de los Macri, como Sevel International Inc, mientras es financista de Lázaro Báez, y de Boudou.

Asunto que a partir de una información proveniente de los Panama Papers, se encuentran nexos políticos, empresariales, y de propiedades, entre nada menos que Mauricio Macri, Fernando de Andreis, Lázaro Báez, Amado Boudou, Eduardo Costa, Mariana Zuvic, y Elisa Carrió.

Zuvic, que denuncia constantemente a Lázaro Báez, no conoce o hace como que no conoce que el socio de su esposo es financista de Lázaro en Austral Construcciones.

Carrió, que investiga profundamente todos estos temas desde hace décadas, y que presentó (con Graciela Ocaña) las denuncias por el lavado de activos del BGN de los Rohm, no sólo no sabía que la diputada PRO Carmen Polledo y su esposo Fernando Polledo, (los dueños de costa Salguero), habían sido denunciados por ella misma, sino que desconoce, o hace como que desconoce, que el emprendimiento inmobiliario “Chacras de la Cruz” donde construyó su casa, fue generado y llevado adelante por Asconapé, socio del financista de Lázaro Báez, de Boudou, y de los Costa – Zuvic.

Marcela Campagnoli, la referente de Elisa Carrió en Pilar, no se enteró que su propio hermano, el fiscal José María Campagnoli, buscando a un financista de Lázaro Báez, había investigado y encontrado al socio de su compañera de la CC Mariana Zuvic.

Jorge Lanata, que estuvo codo a codo con el fiscal Campagnoli, y que viajó a Las Vegas a buscar la información de las empresas investigadas por el fiscal, (información que, por cierto, nunca trajo), aparecía constantemente con Zuvic y Carrió, sin enterarse jamás de este entramado que vincula a Lázaro Báez con las anteriores.

Uno se termina preguntando si esta gente realmente desconoce todo lo que nos quiere hacer creer que desconoce, si verdaderamente tienen los enfrentamientos políticos que nos quieren hacer creer que tienen, si representan un papel mediático que esconde toda la mugre que los iguala, o si los incautos que verdaderamente desconocemos la catadura moral de todos ellos, somos nosotros.