La investigación que apunta a un eventual móvil económico en la muerte del exfiscal de la Unidad AMIA Alberto Nisman quedó empantanada ante un planteo de la madre de la víctima, Sara Garfunkel.
En tanto, esta semana el fiscal Eduardo Taiano decidió citar a todos los vecinos del complejo Le Parc, conformada por tres torres en Puerto Madero, que habitaron el lugar durante el lapso en que tuvo lugar la muerte de Nisman, aquel 18 de enero de 2015.
Días atrás, el fiscal que reasumió la causa luego que la Corte Suprema de Justicia estableciera la competencia federal pidió el informe de la cuenta bancaria que Nisman tenía en el banco de Estados Unidos Merril Lynch, en la que figuraba como apoderado, en tanto que como titulares se encontraban el empleado informático Diego Lagomarsino, Sandra Nisman y Sara Garfunkel.
La medida de prueba apuntaba a desentrañar un eventual móvil económico en la muerte del fiscal.
En otra causa que tiene a su cargo el juez federal Claudio Bonadio existe un informe de la Unidad Anti lavado de Estados Unidos (Fincen por sus siglas en inglés) que asegura que hubieron depósitos en esa cuenta por más de 600 mil dólares.
Por ello Garfunkel, Sandra Nisman y Lagomarsino son investigados por presunto lavado de dinero, aunque por pedido de los abogados de las dos primeras está cuestionada la procedencia del informe de la Fincen sobre la cuenta bancaria en el Merril Lynch.
Ante la medida de prueba solicitada por Taiano en la causa por la muerte del fiscal, el abogado Pablo Lanusse, defensor de Garfunkel, se opuso a la medida de prueba al recordar que la procedencia respecto a la información sobre la cuenta bancaria estaba siendo cuestionada por ellos ante la Cámara Federal de Casación Penal.
Por ello la medida de prueba quedó suspendida hasta tanto se defina la suerte del planteo que Garfunkel hizo ante la Casación, luego que la misma fuese rechazada en primera y segunda instancia.
En tanto, Taiano pidió ésta semana al consorcio de Le Parc los nombres de quienes vivieron allí (inquilinos o bien propietarios) durante el lapso en que tuvo lugar la muerte de Nisman, para citarlos a que brinden declaración testimonial.
Hasta el momento, prestaron declaración como testigos solo algunos vecinos de Nisman, entre ellos un ciudadano de origen oriental que vivía en el mismo piso que el fiscal, pero en esas audiencias no surgieron datos de importancia.
En los últimos días, la Fiscalía de Taiano retomó la investigación tras definirse la competencia de la causa, aunque la Unidad Fiscal especial sólo cuenta con cinco empleados (dos secretarios y tres prosecretarios) y hubo un pedido a la procuradora general de la Nación, Alejandra Gils Carbó, para reforzar el personal.
También se dispuso la custodia durante el fin de semana de las oficinas de la Unidad Fiscal especial a cargo de Taiano que funcionan en el edificio de la calle 25 de mayo 179 de la Capital Federal.
La medida de seguridad -que incluye la presencia de dos gendarmes- es a raíz de que no había custodia hasta entonces durante los fines de semana y para evitar algún tipo de incidente con la documentación del voluminoso expediente.