Le digo con toda franqueza: no me sorprende el golpismo de Zaffaroni. El doctor Eugenio Raúl Zaffaroni, con su cara dura como la piedra, confesó que quiere que el gobierno de Macri se vaya lo antes posible y vaticinó que “vienen tiempos de violencia extrema”. En su incontinencia oral, el jefe de asesores legales de Cristina confirmó su vocación autoritaria y antidemocrática. El primer delito que cometió fue el sincericidio. Es una vergüenza y un papelón internacional para todos los argentinos que semejante personaje nos represente en la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
Yo le digo que no me sorprende su golpismo porque el que ya lo hizo una vez, lo puede hacer de nuevo.
El presuntamente prestigioso doctor Zaffaroni, ex integrante de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, ya tuvo relaciones carnales con dos dictaduras y jamás se le escuchó una sola crítica a su compañero de militancia cristinista, el general Cesar Milani que hoy está preso por violaciones a los derechos humanos durante el terrorismo de estado de Videla y su banda y por enriquecimiento ilícito.
Por eso no me canso de hacerle algunas preguntas inquietantes como esta. Doctor Zaffaroni:
-¿Qué espera para renunciar como integrante de la Corte Interamericana de Derechos Humanos? Sus compañeros deberían saber que usted fue juez y juró por los estatutos de dos dictaduras a falta de una y que una de ellas fue el más feroz genocidio perpetrado por Videla y sus cómplices.
-¿Es cierto que durante el terrorismo de estado usted no le dio lugar a ninguno de los 120 habeas corpus sobre detenidos desaparecidos que pasaron por su despacho y que por el contrario redactó un manual militar en el que justificaba los golpe de estado y en el que discriminaba a los homosexuales para que no fueran parte del Ejército?
-¿Podría confirmar si las Madres de Plaza de Mayo encabezadas por Hebe de Bonafini hace un tiempo lo definieron como “juez de la patria” porque milita para el kirchnerismo pero antes lo habían incluido en una lista de 437 jueces que colaboraron con la dictadura militar? No mienta, doctor. Mire que tenemos el recorte de aquella solicitada.
Zaffaroni que desde hace un tiempo se hace el revolucionario calificó al gobierno democrático actual como un “totalitarismo corporativo que es una nueva fase del colonialismo”.
Hubo una rápida reacción institucional. El titular de la cartera de Justicia, Germán Garavano le exigió a Zaffaroni que renuncie a su cargo internacional y la encargada de la seguridad del estado, Patricia Bullrich lo descalificó a Zaffaroni lisa y llanamente como “golpista” por proponer que se corte la vida normal de la democracia que son las elecciones.
El doctor Guillermo Lipera, presidente del colegio de abogados hará una presentación para que Zaffaroni sea removido del cargo por carecer de autoridad moral y de la imparcialidad que reclaman los reglamentos de la Corte de Derechos Humanos.
El doctor Santiago Dupuy denunció a Zaffaroni por incitación a la violencia colectiva y apología del crimen.
No me sorprende el golpismo de Zaffaroni. Fue el autor ideológico de una solicitada que firmaron hace poco decenas de cristinistas fanáticos donde aseguran “que la república cruje y la democracia y el pluralismo están en peligro”.
Es el mismo Zaffaroni que defiende a la dictadura chavista venezolana al igual que la mayoría de los firmantes de ese panfleto. Y hablan de pluralismo y república los que nos llevaron al lado de Cuba, Venezuela e Irán y los que manejaron el país con un autoritarismo feroz, con el Congreso reducido a la servidumbre, con la justicia colonizada y con un oligopolio de medios de comunicación que se la pasaron atacando opositores y periodistas independiente y chupándole las medias a Cristina y su banda que se dedicó a saquear al estado como definió el fiscal Pollicita.
Zaffaroni se llena la boca hablando de los pobres y en contra de los ricos y cobra una jubilación de privilegio de casi 400 mil pesos por mes pese a que ya era un hombre de fortuna.
En aquella solicitada, Zaffaroni tuvo la complicidad de Estela Carlotto que hace tiempo abandonó toda idea de autonomía y se entregó por entera a la militancia cristinista. Dijo la titular de Abuelas que “Si pudimos con Videla, vamos a poder con Macri”. Es como decir que 10 millones de argentinos votaron a un genocida. ¿Creerá eso de verdad? ¿O es la desesperación por ver como se caen a pedazos las mentiras de la cleptocracia pinguina a la que tanto aportó ella y Hebe de Bonafini? Todavía tienen que pedir disculpas por instalar frases mentirosas como “que devuelvan los nietos” y “la gendarmería mató y desapareció a Santiago Maldonado”.
Pero lo más aberrante de Zaffaroni, que tiene una vida y una trayectoria repleta de hechos aberrantes, es su autoría ideológica del sistema que premia a los victimarios de delitos y castiga doblemente a las víctimas y a sus familiares. Y siguen las preguntas inquietantes.
Doctor Zaffaroni:
-¿Cuanta verdad hay en esa información que afirma que usted calificó a Néstor Kirchner de nazi de la Patagonia por violar la división de poderes en Santa Cruz y que luego se hizo amigo del presidente, de la presidenta Cristina pero sobre todo de su vice presidente Amado Boudou a quien invitó a su cumpleaños y justificó en sus delitos?
-¿Se puede estar en la Corte Interamericana pese a que hay fallos suyos denigrantes de la condición humana y decididamente inmorales y humillantes para las víctimas? Hablo del fallo Tiraboschi donde usted minimizó la violación de una nenita porque fue realizada con la luz apagada y porque no fue penetración sino sexo oral al que fue obligada la chiquita? Al imponer la pena por abuso deshonesto, sostuvo que no correspondía aplicar la pena máxima porque, entre otras razones, la víctima, una niña de ocho años, había sido abusada con la luz apagada y, en palabras de la sentencia, “el único hecho imputable se consumó a oscuras, lo que reduce aún más el contenido traumático de la desfavorable vivencia de la menor”.
-¿No tiene ninguna responsabilidad además de haber pagado la multa correspondiente por haber alquilado sus departamentos para que en 5 de ellos se ejerciera la prostitución? ¿No cree que sus excusas fueron poco creíbles cuando señaló que fue su amigo íntimo el que administraba esos departamentos y que usted no conocía a los inquilinos?
-¿Sintió vergüenza cuando fue al Senado de la Nación a defender su nominación y se descubrió que no había pagado 94 aportes previsionales del Registro de Trabajadores Autónomos, según la AFIP y que había omitido bienes y cuentas bancarias en el exterior en su declaración jurada?
-¿Cree de verdad que se puede construir una sociedad democrática con vigencia plena de los derechos humanos y la paz con premios y sin ningún castigo? ¿El abolicionismo no nos lleva a la primitiva ley de la selva?
No se asuste doctor Zaffaroni. No haré más preguntas. Sé que nunca le gustaron los medios de comunicación críticos. Alguna vez hasta los responsabilizó por multiplicar noticias policiales en algo que usted definió como terrorismo mediático.
Está claro que usted es el Víctor Hugo Morales del derecho. Comparan este gobierno con una dictadura y desayunan bronce. Pero son personas sin vergüenza. Y sin moral. Tristes títeres de Cristina.