En los últimos meses acontecieron distintos hechos que dan a entender la feroz avanzada contra la libertad de expresión de toda persona con ideologías contrarias al Gobierno y, sobre todo, contra el periodismo disidente.
Se trata de una suerte de persecución a la que será sometido cada uno de los que instiguen a pensar libremente sobre los actos que la actual administración nacional viene llevando a cabo.
El ejemplo más elocuente refiere a la denuncia presentada por la presidenta de la Asociacion de Víctimas de Trolls Guendalina Palazzini, contra los economistas Javier Milei y Miguel Boggiano, por supuestamente “instigar a cometer delito” sólo por haber convocado a través de las redes sociales a participar de la marcha de los barbijos realizada el pasado 7 de mayo.
Pero ello es simplemente una muestra banal de lo que se oculta detrás del telón político, donde se esconden los negocios, y el temor de que sean descubiertos y replicados a través de los medios o las redes sociales.
No por nada el Ministerio de Seguridad a cargo de la ministra Sabina Frederic ha confesado tener una fuerza que “ciberpatrulla” por las redes sociales.
Todo indica que se vienen épocas de mordaza, persecución y censura. Muy probablemente vuelvan a suceder, como aconteció en el pasado, los típicos escraches a los que se expresan en forma contraria al oficialismo de turno, con burdas operaciones de prensa llevadas a cabo por pseudoperiodistas que recibirán un cheque en blanco a cambio de su propia alma.
No hay motivo alguno para obligar a la población a descargarse una app que controla tus movimientos y deja expuestos datos personales. Ya lo demostraron varios especialistas informáticos que dejaron a la vista las fallas en la seguridad de la aplicación Cuidar y la facilidad con la que se puede hackear.
Para colmo, resulta ser inconstitucional. Ya lo expresó el abogado y ex consejero de la magistratura Alejandro Fargosi en su cuenta oficial de twitter: “La App “Cuidar” viola directa o indirectamente derechos reconocidos por la Constitución en sus arts. 14, 14bis, 16, 17, 18, 19, 23, 38, 32, 32, 33 y seguramente otros más” manifestó.
La App “Cuidar” viola directa o indirectamente derechos reconocidos por la Constitución en sus arts. 14, 14bis, 16, 17, 18, 19, 23, 38, 32, 32, 33 y seguramente otros mas.
— Alejandro Fargosi (@fargosi) May 10, 2020
Es sencillamente inconcebible que cada uno de nosotros esté trackeado por el Estado.
Ni hablar de Pegasus, el software que hoy tiene en mano el Gobierno para espiar a los periodistas independientes o la pinchadura de los celulares de los mismos.
No se trata de algo especulativo, es un engranaje que ya se puso en marcha con el fin de conseguir información de las personas de la prensa que llevan a cabo investigaciones o análisis que no son en favor del Gobierno y, de ser posible, descubrir los informantes que éstos poseen.
Muestra de ello es el hecho de que en abril, Whatsapp acusó a pegasus de más de 700 intento de hackeos.
Es necesario seguir insistiendo con el mismo acto de sincericidio que protagonizó Alberto Fernández mientras se encontraba peleando por la presidencia. Se trata de aquel en el que supo decirle al colega Joaquín Morales Solá “Cuidado con lo que va a decir, se puede arrepentir mañana”.
No es una idea conspiranoica ni nada por el estilo, el Gobierno está decidido a avanzar contra la libertad de expresión y no ostenta siquiera la sutileza de ocultarlo. Lisa y llanamente quieren a todo compatriota sumiso y obsecuente.
Depende de todos -nosotros- que puedan avanzar contra las libertades individuales o no. Ya no es una cuestión de partidismos políticos o favoritismos, se trata del futuro del funcionamiento racional y analítico de cada uno.
De todos depende…