Siempre servicial con el kirchnerismo —ahora más que nunca, ya que tiene pauta oficial en su sitio web— Horacio Verbitsky decidió este domingo embestir contra los camaristas que han puesto en jaque a Cristina Kirchner, Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi.
En su blog El Cohete a la Luna, el escriba se dedica a pegarle a la jueza federal María Alejandra Biotti solo por animarse a frenar el intento del oficialismo de frenar la movida que intenta en estas horas y que garantizaría la impunidad de la vicepresidenta.
Porque, ¿qué otra razón hay detrás de la reforma judicial, más que zafar a Cristina de sus problemas judiciales?
Verbitsky cuestiona a la Justicia y acusa a los jueces de querer gobernar el país, solo por hacer su trabajo. La expresidenta, bien agradecida con él.
“Bruglia y Bertuzzi creen tener derechos subjetivos adquiridos a los cargos que ocupan en la Cámara Federal de la Capital, donde comparten funciones con dos colegas designados de acuerdo con el procedimiento constitucional: Martín Irurzun, que ocupa esa posición desde 1994, durante la presidencia de Carlos Menem, y Mariano Llorens, designado en 2018 por Maurizio Macrì. No es el caso de Bruglia y Bertuzzi, quienes eran jueces de un tribunal oral y fueron trasladados a la Cámara, sin concursar ni obtener acuerdo del Senado para su nueva función. Es decir, por la mera voluntad del Poder Ejecutivo y con su entusiasta acuerdo.”, dice Verbitsky, desconociendo el procedimiento que llevó a los magistrados al lugar que ocupan, con la venia de la Corte Suprema, en un trámite que fue intachable.
Se recuerda que Bruglia y Bertuzzi eran jueces del Tribunal Oral Federal 4 y fueron trasladados para ocupar dos vacantes de la Cámara de Apelaciones del mismo fuero que estaban vacantes en 2018.
Entre sus argumentos, los jueces aludieron además a la Acordada 7 de 2018, firmada por la Corte , en la que se dispuso que los traslados de magistrados que pertenezcan a un fuero de similar jerarquía no debían ser aprobados en la Cámara Alta.
"La Corte Suprema de Justicia ha convalidado traslados de jueces federales y siempre entendió que esos traslados debían considerarse definitivos", argumentaron desde ese mismo cuerpo supremo.
Sin embargo, nada de ello parece interesarle a Verbitsky, quien ha decidido salvar a “la jefa” de toda manera posible. Cueste lo que cueste. Porque no importa que Cristina robó de manera descarada. Business are business.
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