Tal y como anticipó Tribuna de Periodistas, este lunes puntuales agentes de la Agencia Federal de Inteligencia denunciaron a la titular de esa agencia, Cristina Caamaño, por violar sus identidades.
Ocurre luego de la “filtración” de las actas del Libro de Protocolo de Resoluciones de la exSIDE por parte de esta última, lo cual, dicho sea de paso, la ha puesto al borde de la renuncia.
Al exponer ese documento, Caamaño no solo afectó “intereses de la Nación”, sino que, como se dijo, dejó expuestos los datos personales de un centenar de espías y exagentes de inteligencia enviados al exterior oportunamente.
Los primeros denunciantes son María Laura Días, Sergio Iván Pistone, Pablo Sergio Damián y Eduardo Alberto Sandoz, cuya denuncia —Expediente 7550/2020— recayó en el Juzgado Criminal y Correccional Federal Nº 1 de la Ciudad de Buenos Aires.
Allí se señala que Caamaño podría haber incurrido en los delitos de abuso de autoridad, violación de los deberes de funcionario público (artículo 248 del Código Penal) y revelación de secretos políticos y militares (artículo 222).
El pasado sábado 26 de septiembre, este portal explicó en detalle qué había detrás de la filtración de la titular de la AFI. Y se anticipó lo ocurrido este lunes: “Al menos 20 agentes han decidido hacer juicio contra el Estado por haber sido puestos en riesgo al revelar sus identidades”, se publicó.
Lo que ha ocurrido este lunes es solo la punta del iceberg: se vienen nuevas denuncias contra Caamaño por parte de otros espías que han sido expuestos.
A su vez, se decidirá —esta misma semana— si la mujer sigue al frente de la AFI. Lamentablemente para ella, todo indica que eso no ocurrirá.
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