La Argentina no da para respiros, nunca. Ya lo decía el viejo y querido Tato Bores… y no se equivocaba. Cuando no termina de amainar un escándalo, aparece otro nuevo en el horizonte. Sin solución de continuidad.

Refiere lo antedicho a lo ocurrido con Matías Kulfas, cuya suerte terminó sellada luego de que se filtrara un “off the record” donde se aseguraba que, detrás de la millonaria obra del gasoducto Néstor Kirchner se escondía una licitación a medida de Techint, empresa con la cual Cristina Kirchner vive una especie de amor-odio. 

Hasta hace pocas semanas, supo sostener discretos encuentros con su principal pope, Paolo Rocca. Luego, por motivos desconocidos —¿negocios?— hizo una arenga pública contra este último. Acaso sabiendo que se estaban por filtrar los detalles de un presunto negociado que involucra a sus acólitos de La Cámpora.

Es curioso, porque la vicepresidenta enfureció por la filtración, adjudicada al “fuego amigo” del Ministerio de Desarrollo Productivo de la Nación, pero jamás la escandalizó lo que allí se denuncia. 

“Es muy doloroso que este tipo de ataques lo ejecuten funcionarios del propio gobierno del Frente de Todos”, sostuvo Cristina mostrando improvisada sorpresa. Y terminó de sellar el destino de Kulfas. 

El mensaje que incomodó a la otrora presidenta acusa: “Ellos armaron un pliego de licitación a la medida de Techint y de la chapa que el grupo fabrica en Brasil, de 33 mm de espesor. Si en lugar de poner esa especificación hubieran puesto 31 mm, como son los gasoductos en Europa, se podría haber provisto caños desde otra firma que produce en Villa Constitución (Laminados Industriales SA)”. 

Nada que deba sorprender: lo mismo había revelado el propio Kulfas en una entrevista radial por radio AM750, horas antes del trascendido..

Yendo al fondo de la cuestión: fuentes oficiales consultadas por Tribuna de Periodistas reconocieron que el “albertismo” no tiene injerencia alguna en la construcción del gasoducto Néstor Kirchner. Solo funcionarios del cristinismo y La Cámpora —que sería casi lo mismo— a través de la firma IEASA (Integración Energética Argentina Sociedad Anónima).

Convertida en la empresa del Estado más estratégica por su rol clave en la política energética, siempre estuvo sospechada de negocios tan millonarios como discrecionales, manejados por La Cámpora.

IEASA maneja una caja abultada que está en manos de esa agrupación. Su titular, desde febrero del 2021, es Agustín Gerez, un santacruceño de 36 años que responde políticamente a Federico Basualdo, el subsecretario de Energía que el ministro Martín Guzmán nunca pudo echar, y que responde a Cristina. En política, se sabe, no existen coincidencias.

La oposición lo sabe y es por eso que el interbloque de senadores de Juntos por el Cambio presentará un Proyecto donde exigirá al Poder Ejecutivo precisiones respecto a la posible veracidad de los trascendidos.

"En dicha solicitud, los senadores requerirán precisiones vinculadas a la licitación que dio origen al mensaje 'en off' publicado en los medios de comunicación y difundido por la Vicepresidenta de la Nación (Cristina Kirchner) respecto a presuntas cuestiones vinculadas a hechos de corrupción", indicaron en un comunicado.

En ese marco, detallaron que "los representantes de Juntos por el Cambio preguntarán si se ha iniciado algún o algunos procesos administrativos y/o penales vinculados a la comisión de posibles delitos y/o incumplimiento de deberes de funcionario público y si Alberto Fernández tiene decidido impulsar alguna investigación vinculada a potenciales hechos de corrupción en el marco del proceso licitatorio mencionado".

A su vez, pidieron "saber cuál fue el procedimiento de formulación de pliego licitatorio para el gasoducto denominado 'Néstor Kirchner' y cuáles fueron los fundamentos técnicos determinantes respecto a la definición de la necesidad de utilizar chapa de 33mm de espesor en el marco de la licitación mencionada".

También solicitarán "saber si al momento de conformación del mencionado pliego se tomó en cuenta que la especificación técnica podría tener como implicancia directa una menor cantidad de oferentes y por ende un desmedro directo al principio de concurrencia que conforme la normativa aplicable debe regir cualquier procedimiento licitatorio".

Todo indica que se está a las puertas de un nuevo escándalo de corrupción del kirchnerismo. Lo sorprendente es que esta vez la denuncia la ha impulsado el propio Frente de Todos. Cosas que solamente ocurren en la Argentina.

Dicho sea de paso, si a Cristina Kirchner le enojan tanto los “off the record” dentro de su espacio, ¿por qué no les tira las orejas de los referentes de La Cámpora que utilizan ese mismo recurso para esmerilar la figura de Alberto Fernández?

En otro orden de cosas, avanza sobre rieles la idea del kirchnerismo de ampliar el número de miembros de la Corte Suprema de Justicia, so pretexto de que de esa manera funcionará mucho mejor. 

En realidad, opera allí la desesperación de Cristina por las causas que debe resolver ese cuerpo, que la involucran de manera directa. Expedientes por corrupción en los cuales aparece severamente complicada. 

Como sea, el oficialismo no logrará avanzar con su idea de ampliar la Corte, por ausencia de las mayorías necesarias. No obstante, insistirá en instalar el debate. Es su naturaleza.

En tal contexto, sorprendió la encendida defensa que hizo en los últimos días Alberto Fernández a la idea de que la Corte tenga 25 miembros.

En 2016, en una entrevista que le hizo La TV Pública, el jefe de Estado dijo textual: "La Corte es una institución del país. Nació con cinco miembros. Cristina tuvo el mérito de volver a cinco miembros, para que no se juegue con el número de jueces para tener jueces adictos... La Corte tenía cinco miembros, y debe tener cinco miembros. El resto es todo una fantasía". 

Finalmente, volviendo a la filtración, se supo que el reemplazante de Kulfas en Desarrollo Productivo será Daniel Scioli, un hombre que responde a Alberto Fernández y del cual Cristina desconfía.

Es una especie de “venganza” del presidente contra su vice, por tener que desprenderse de un hombre de su riñón. No solo firmó su designación, sino que envió a la portavoz oficial, Gabriela Cerruti, a comunicarlo a los medios.

La agencia de noticias oficial Télam terminó de confirmar la ausencia de Cristina en la decisión de marras: “El Presidente eligió a Daniel Scioli para ocupar el Ministerio de Desarrollo Productivo”, tituló al respecto. 

A buen entendedor, pocas palabras.
© Tribuna de Periodistas, todos los derechos reservados