El oficialismo decidió aplicarle cicatrizante de acción rápida a las heridas que provocó el cierre de listas en busca de suavizar las tensiones internas y enfocado de lleno en la campaña electoral, se entusiasma con la competitividad del binomio Sergio Massa-Agustín Rossi.
Una serie de reuniones -con sus correspondientes fotografías divulgadas a la prensa- entre referentes de Unión por la Patria (UxP) y Daniel Scioli en los últimos días sirvieron para aplacar el barullo político que se generó apenas conocida la integración de la fórmula presidencial encabezada por Massa y que la propia Cristina Kirchner envalentonó a principios de la semana.
La vicepresidenta de la Nación y -¿devaluada?- jefa del ex Frente de Todos amplificó el ruido interno en el peronismo con ácidos comentarios dirigidos al mandatario Alberto Fernández y a funcionarios afines, antes de que el propio ministro de Economía solicitara la colaboración del Gobierno en su conjunto para bajar los decibelios y unir fuerzas para la campaña que acaba de iniciarse, de cara a las PASO de agosto.
El propio Scioli, uno de los principales damnificados por la decisión de ungir a Massa como el precandidato presidencial estrella de UxP con vistas a las primarias, al igual que el ministro del Interior, Eduardo "Wado" de Pedro, se comprometió a empujar la fórmula del tigrense con el santafecino Rossi, además de prestarse para las fotos en pomposas reuniones de "camaradería" con Cristina, Fernández y el mismo líder del Frente Renovador: lógicamente, el encuentro cumbre de la semana.
A su vez, buscando ofrecer otro robusto gesto de unidad del espacio oficialista, Massa recibió también en el Palacio de Hacienda a Juan Manzur, cuyas pretensiones de acompañar en la boleta al "elegido" por Cristina "Wado" de Pedro, como aspirante a la Vicepresidencia de la Nación en las PASO, se desvanecieron de repente luego de la "rosca" de fines de la semana pasada de la que surgió el binomio Massa-Rossi: sobre todo después de que un grupo de gobernadores peronistas le bajaran el pulgar al tándem que promovía el kirchnerismo.
Manzur se entrevistó con Massa junto al mandatario electo de Tucumán, Osvaldo Jaldo, que se transformó en el gobernador más votado de la historia de esa provincia. En las recientes elecciones, la fórmula del Frente de Todos que integró con Miguel Acevedo obtuvo 612.402 votos (55 por ciento del total), por lo que batió un récord que ostentaba desde 2011 José Alperovich, secundado por el propio Manzur en esos comicios.
La reunión en el Ministerio de Economía se produjo un día después de que la Junta Electoral de Tucumán confirmara el final del escrutinio definitivo, que estableció una victoria por más de 20 puntos porcentuales de la dupla Jaldo-Acevedo sobre Juntos por el Cambio (33,3%, con Roberto Sánchez a la cabeza) en la convocatoria a las urnas del 11 de junio pasado.
Massa, ¿el precandidato presidencial más votado?
Así, con el peronismo prácticamente en su conjunto respaldando a Massa y a Rossi, con excepción de la rivalidad que pueda ofrecer el dirigente social Juan Grabois el próximo 13 de agosto, UxP dejó atrás una semana de turbulencias para empezar a enfocarse de lleno en la campaña proselitista de 2023, mientras se entusiasma con la competitividad que muestra su fórmula estelar.
Una encuesta de CB Consultora -la primera realizada después del cierre de listas- mostró que el ministro de Economía sería el precandidato presidencial más votado (24,1%) si las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) se celebrasen hoy, incluso a pesar de los niveles de inflación que se registran en la Argentina. Sumando un 5% que obtendría Grabois, UxP llegaría al 29,1%, 4,7 puntos porcentuales por debajo de Juntos por el Cambio (JxC). En la alianza opositora, Patricia Bullrich (17,3%) se ubicaría por delante del otro aspirante a la Jefatura de Estado de ese espacio, Horacio Rodríguez Larreta (16,5%), para un total de 33,8 por ciento.
El libertario Javier Milei, por su parte, reuniría un 17,2% de los sufragios en las PASO, mientras continúa en declive su rendimiento en encuestas sobre intención de voto. En tanto, la dupla del "peronismo federal" que conforman Juan Schiaretti y Florencio Randazzo obtendría un 3,3%. La izquierda, por su parte, apenas seduce al 1,6% de las opiniones, de acuerdo con CB Consultora, sobre un universo de 2.856 casos de todo el país.
La performance que podría alcanzar el binomio Massa-Rossi en las urnas intensifica en los albores de la campaña electoral las esperanzas de UxP de forzar una segunda vuelta en los comicios de este año, en especial si la boleta del oficialismo en la provincia de Buenos Aires tracciona "desde abajo hacia arriba" tanto en las PASO como el 22 de octubre, con una oferta electoral apuntalada allí por dirigentes kirchneristas de primera línea: entre ellos, el gobernador Axel Kicillof, Máximo Kirchner y "Wado" de Pedro.
"Nuestra fórmula va a tomar volumen y se va a beneficiar con la interna en Juntos por el Cambio", confió una fuente del peronismo consultada por Noticias Argentinas, en referencia a la encarnizada disputa mediática que mantienen Patricia Bullrich y Rodríguez Larreta con vistas a las PASO. "Es importante que nuestro espacio transite la campaña sin voces discordantes. Eso fue lo que se saldó en estos días", agregó.
En el mismo sentido, indicó: "En el cierre de listas a Scioli lo dejaron afuera, entonces el sciolismo podía mostrarse como una voz crítica. Bueno, eso quedó saldado; lo que no significa que él esté contento". La misma fuente dijo a NA que el actual embajador en Brasil podría mantenerse en el cargo si UxP logra retener el poder en la Nación. Señaló, además, que ni una postulación para el Parlamento del Mercosur (Parlasur) ni un lugar en la lista de precandidatos a diputados en la provincia de Buenos Aires por debajo de Victoria Tolosa Paz y de Santiago Cafiero le interesaban de cara a las PASO a cambio de bajarse de la carrera presidencial, ya que "él quería liderar un proyecto".
"Tendríamos que tener un castigo rotundo, pero..."
En el peronismo, con vistas a las próximas elecciones, entienden que será clave el rendimiento que alcance el gobernador bonaerense en las urnas para entibar las pretensiones de éxito en el ámbito nacional de Massa y Rossi desde ese populoso distrito. "La estrategia es garantizar la victoria en la Provincia, pero si Kicillof saca una diferencia de 10 puntos o más ahora en las PASO nos tira para arriba. Hoy nos empuja desde abajo, cuando por lo general sucedía al revés", sostuvo la fuente consultada por esta agencia, que agregó que el ex ministro de Economía muestra una "muy buena performance" en distintas encuestas.
Comentó, además, que es de esperar que la propuesta electoral que lidera Massa en UxP se fortalezca si la inflación sigue mostrando una tendencia en declive en los próximos meses, por más leve que sea. A propósito, según un estudio de la Fundación Libertad y Progreso, el costo de vida de junio pasado aumentó por debajo del 7%: 6,8 por ciento más precisamente. El dato oficial se conocerá el próximo 13 de julio, un mes antes -con exactitud- de las PASO.
"Después de lo que fueron estos cuatro años de Gobierno, y hablando objetivamente, tendríamos que tener un castigo rotundo en estas elecciones, pero en política nunca se sabe. En verdad, me resulta extraño que seamos competitivos con esta fórmula, pero bueno, lo estamos siendo y tenemos chances de ganar", expresó la fuente del peronismo consultada por NA. En el mismo sentido, consideró que para Massa, por su perfil dialoguista, sería más beneficioso enfrentar en el cuarto oscuro a Patricia Bullrich que a Rodríguez Larreta.
"En Juntos por el Cambio lo que está sucediendo es una disputa por el liderazgo del espacio que trasciende la pelea por la candidatura presidencial. Eso nos puede favorecer sobre todo si gana Patricia Bullrich, porque lo que nosotros creemos es que Massa tendrá entonces alguna chance de pescar entre los moderados de Rodríguez Larreta", agregó la fuente, en referencia a los votantes del actual alcalde porteño de cara a las elecciones de octubre. "Y aparte al no haber kirchnerismo en nuestra fórmula, a ellos se les desacomoda la estrategia de campaña, desde lo discursivo", consideró.
En efecto, por estos días, las energías de los "halcones" y las "palomas" de JxC parecen más destinadas al intercambio de munición gruesa entre sí que a cuestionar al oficialismo, en tono anti-kirchnerista llegado el caso, como lo intentó el ex presidente Mauricio Macri en declaraciones públicas tras conocerse la fórmula Massa-Rossi. En este contexto, alcanzó nuevas cumbres en las últimas horas la visceral interna entre Patricia Bullrich y Rodríguez Larreta, en lo que posiblemente se convierta en una constante hasta la fecha de las elecciones primarias en la alianza opositora.
Por último, se espera que después de las elecciones en Córdoba, con triunfo del oficialista Martín Llaryora (peronista, respaldado por Schiaretti) sobre Luis Juez, tome volumen la campaña en Santa Fe, otra provincia en donde JxC busca jugar fuerte, en medio de incesantes ráfagas de fuego amigo entre larretistas y bullrichistas con vistas a las PASO del 16 de julio próximo allí.
Y a propósito de Córdoba, según pudo averiguar Noticias Argentinas, tanto Rodríguez Larreta como Patricia Bullrich le ofrecieron al radical Mario Negri un lugar en sus listas de precandidatos a diputados en esa provincia con miras a las primarias nacionales de agosto. El jefe de Gobierno porteño le propuso el primer puesto y la ex ministra de Seguridad, el tercero. Sin embargo, el actual presidente del bloque de la Unión Cívica Radical en la Cámara baja y titular del interbloque parlamentario de JxC le bajó el pulgar a ambas proposiciones, dado que -desde una posición neutral- abriga la expectativa de asumir eventualmente como funcionario si la alianza opositora vuelve a ser gobierno a partir del 10 de diciembre próximo.