El gobierno de la provincia de Buenos Aires gasta menos de $150 por día para el desayuno de cada chico, y menos de $350 diarios para darle de almorzar, dentro del llamado Servicio Alimentario Escolar (SAE).

La última actualización dispuesta para este servicio data de septiembre de 2023, poco antes de las elecciones de octubre, estableciéndose que los valores para la prestación Desayuno-Merienda iban a ser de $142 por cupo y la prestación Comedor, $345,20.

Lo que hace un total de $487 diarios por cada alumno para que desayunen y almuercen. Un monto exiguo de por sí y que se achica mucho más con los niveles actuales de inflación.

Es decir, que rigen tales montos desde hace más de 5 meses, pese a que, solo tomando el período que va desde septiembre a diciembre del año pasado, el costo de vida aumentó un 60%. Y aún falta saber el índice de enero, que rondaría el 20%.

“Tuvimos que hacer malabares para darles de comer a los chicos en las escuelas de verano”, grafican desde el Consejo Escolar de General Pueyrredon.

Lo peor de todo es que desde La Plata no hay ninguna señal de que vayan a subir las partidas. “Ya viajaron varios consejeros de diferentes distritos de la provincia y la respuesta que les dan es la misma: por ahora no va a haber aumento”, agregan.

Otro tema que preocupa sobremanera es la situación del transporte escolar, al que no sólo le pagan poco, sino que también con atraso, ya que, según se pudo saber, les deben desde octubre de 2023. Aunque trascendió que se estaría por saldar la deuda por estas horas.

Respecto al Servicio Alimentario, el incremento de septiembre de 2023 respecto a los valores que regían desde junio de ese año fue del 40%. Hasta ese momento los mismo eran de $101,40 para Desayuno-Merienda y $246,60 para Comedor.

Si bien se trató de un aumento importante, se partía de montos ya de por sí muy bajos. Pero ahora han quedado totalmente obsoletos y hasta irrisorios.

“La situación es gravísima. No sólo no va a haber transporte para los chicos, sino que les vamos a tener que dar de comer cada vez peor, hasta que los proveedores digan basta, ya que a nadie le conviene vender por debajo del costo”, dicen desde una escuela de Mar del Plata.

Lo que redundaría lisa y llanamente en menos comida para los chicos.

De acuerdo a la información oficial, el Servicio Alimentario Escolar está dirigido “a niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad social, escolarizados en escuelas públicas de la provincia de Buenos Aires, con el objetivo de garantizar una cobertura nutricional uniforme asistiendo particularmente a los más vulnerables”.

Los fondos provienen de La Plata, más precisamente desde el ministerio de Desarrollo de la Comunidad a cargo de Andrés “Cuervo” Larroque, uno de los líderes de “La Cámpora”, y son canalizados por los Consejos Escolares de cada municipio.

Cada distrito de los 135 que componen la provincia, tiene asignado una cantidad de cupos determinados. 

Los montos de esta prestación siempre fueron bajos, un tema que este medio viene siguiendo desde hace tiempo.

El 22 de abril de 2022, se comunicaron los nuevos valores: $125,08 en el caso del módulo Comedor, $50,76 para DMC (desayuno merienda). Tomando los montos actuales, representa en 22 meses, es decir de abril de 2022 a febrero del actual, un incremento que no llega al 150% para el primer caso, y de menos de un 200% para el segundo.

Cuando sólo la inflación de todo el año pasado fue del 211%.

Dentro del SAE, funcionan tres módulos o prestaciones: Desayuno-Merienda, Comedor y MESA. 

El Módulo Extraordinario para la Seguridad Alimentaria (MESA), cuyo último valor fue de $4187, es una caja con productos alimenticios que se reparte, según acusa la oposición, de manera discrecional, compuesta por alimentos de primera necesidad como arroz, fideos secos, sal, leche en polvo, yerba, azúcar, harina 000, sémola, productos enlatados y puré de tomate.

De acuerdo a cifras oficiales, aquel servicio alcanza a más de 2 millones de familias de alumnos que asisten a los 11 mil comedores escolares que funcionan en los establecimientos educativos incluidos en el Servicio Alimentario Escolar.

En una de sus clásicas recorridas por la costa atlántica, particularmente en distritos gobernados por el kirchnerismo, como Villa Gesell o el Municipio de la Costa de los De Jesús, Axel Kicillof afirmó hace pocos días que “el ajuste al final no fue para la casta, sino para todos y particularmente para los que menos tienen”.