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En un inesperado anuncio a través de la cadena nacional, en el que abundaron las anécdotas auto-referenciales, Cristina Fernández de Kirchner aseguró hoy que en "el Club de París ha accedido a la posición argentina de negociar la deuda sin la intervención del Fondo Monetario Internacional" y añadió que "no habrá comisiones, bancos, empresas ni asesores". En buen romance, la mandataria dejó al descubierto que no se pueden mostrar a organismos foráneos las cuentas públicas ni las mediciones del Indec.
Prosigue Cristina: "La carta recibida habla de una negociación realista, y coincidimos con ello. Debe ser realista el modo y plazo de pago para permitir seguir sosteniendo la actividad económica con inclusión social. Fue este modelo la única manera de poder saldar las deudas". Falso el segundo concepto también: si dependiera del modelo —que aún no se sabe en qué consiste— ya se habría saldado hace mucho tiempo esa deuda.
Sin que nadie le preguntara, ni tuviera que ver con lo que estaba hablando,
Sin embargo, se tomó el tiempo para amenazar con que, si no se aprueba el proyecto oficial gobernará "con otros elementos jurídicos".
Para finalizar, aseguró falazmente que “este Gobierno” paga todas sus deudas. ¿Y los jubilados y la enorme cantidad de sentencias que aún no se han cubierto?
Como puede verse, la campaña electoral ha comenzado con todo.
Equipo de Política Tribuna de Periodistas
