Otra trapisonda del multimedios Clarín. La unidad de negocios que conforma el Diario Muy de Buenos Aires (1), acaba de dar a luz una simiente que desacredita aún más —por los contenidos— al tabloide popular: Muy Esotérico (2).
Arte Gráfico Editorial Argentino (AGEA), Alma Parens que coordina todo emprendimiento gráfico de la poderosa agencia de negocios, se desayuna con esta nueva propuesta pseudocientífica. Aprovechando la marea irracionalista que desborda el género chico “espiritualidad”, todo se recicla, todo se vende. El problema, es que los residuos vienen en bolsas cada vez más grandes.
Si partimos del aserto que: el valor agregado editorial de un medio de difusión, es parte causal de un saludable marketing estratégico, cabe repensar el plus cultural-comunicacional. En otros términos: ¿Todo vale?
El empresario circense americano, Phineas Taylor Barnum (3) —para muchos teóricos creador del marketing moderno—, sostenía que nace un tonto cada cinco minutos. Al cual hay que venderle algo. Una lectura sesgada de este profeta de la publicidad, direcciona el falso pensamiento, que la masa a priori siempre consume basura. También se puede demostrar por el contrario, si al soberano se lo alecciona con modelos de estéticas inteligentes, la consumición de dichos valores, no se harán esperar.
Impensadamente, Barnum, influyó notoriamente en la investigación de muchos psicólogos experimentales americanos. Su contribución o legado, se puede ver en los siguientes apotegmas:
-Efecto Barnum o Forer (4): enunciados generales, que son tenidos como particulares. Abonan esta técnica, astrólogos, videntes, como Jimena La Torre (autora de Muy Esotérico).
-La teoría de la interrupción discursiva: coartar la posibilidad de preguntar incisivamente, y en dirección inductiva-deductiva. De esta forma, nunca se llega al núcleo del problema. Todo charlatán de feria (5), nunca desestima este ardid para embaucar a sus clientes. Dicha técnica, es utilizada por los famosos vendedores de autos usados en EE.UU. (estudiada y descripta ad hoc).
Semiología del engaño
Tomamos un ejemplar de Muy Esotérico. Se desprende como primer concepto el de la precaridad. Formato fascicular de catorce páginas ilustradas rudimentariamente, donde la ausencia de autoridades, editorial, índice, brilla por su ausencia. El “ocultismo”, también se articula en lo institucional. ¿Tanta vergüenza les da dar más nombres? Sólo su autora, la astróloga del diario Muy, figura en plano detalle.
Algunas referencias de edición:
-Elipsis literaria y uso de la duda: mal utilizados arbitrariamente. Acortar la argumentación y encriptar los conceptos a difundir, lo hacen ininteligible. No interesa la profundidad conceptual. Sólo la repitencia de la mentira, para darle formato de verdad.
-No posee ninguna referencia académica/ bibliográfica: carece de sustento los contenidos vertidos. Ausencia de tesis-contra-tesis, confrontación, discusión. Elementos fundantes de cualquier obra literaria que se precie de tal. La pseudociencia no confronta, no está equipada para hacerlo, por eso siempre desprecia al pensamiento científico.
-El “viejo truco” de copiar, pegar y editar: diversidad de ideas de diferente cuño o matriz mal sintetizadas, manifiesta pereza intelectual en la producción de los contenidos.
Manos a la obra: la intrépida astróloga La Torre, nos propone un talismán para atraer el verdadero amor. La inteligencia y los valores del sujeto, ausentes en la consecución del artefacto mágico (¿?)
Astróloga de la farándula nacional: dice que “su vida es mágica”. Mágico también es su verso: “Susana Giménez, tendrá un hombre más joven que ella, pero no será estable”. ¡Ninguna predicción! Utiliza el Efecto Barnum.
En síntesis: una obra literaria pseudocientífica de poca monta. “Muy” torpemente escrita. No introduce ningún concepto nuevo / diferente. Sugiero a su autora —ya que nos va a mentir— que lo haga bien. Es más de lo mismo. Pero sirve como muestra del abuso de la credulidad pública a que estamos sometidos los ciudadanos por parte de estos “maestros de las patrañas cósmicas”. Publicidad ambigua y Explotación de la credulidad pública (6) —ambos delitos tipificados jurídicamente— es el sustrato de esta semiología del engaño de Muy Esotérico.
El gran viraje: ideas para un saludable marketing estratégico
En otra oportunidad, decíamos: “No se tome de ninguna forma, nuestra objeción intelectual y moral sobre la publicación que estamos analizando, como límite laboral de cientos de personas que viven del macaneo posmoderno. Apelo una vez más a la razón, señores de Clarín. Les propongo una “nueva unidad de negocios”, por ejemplo: la colección completa del funcionamiento del sistema escolar en Finlandia y Suecia. Los mejores modelos de educación en el mundo. Al hacerlo, quizá el ejemplo cunda en estas latitudes. Habrá menos pensamiento mágico/pseudociencias, más cerebros libres, y también trabajo con mayor valor agregado.
Lamentablemente, hoy vuelvo a apelar no sólo a la razón (que por lo visto, Clarín no es tan amigo), en esta oportunidad, ilustro con un saludable marketing estratégico: “la solidaridad”. Apoyar emprendimientos nacionales (no políticos, de ONGs poderosas…). Vade suyo también, para aquellos que critican a los portadores de racionalismo secular, con el esquivo, ¿qué hacen Uds. que critican a los charlatanes astrólogos, videntes, etc.? Sin saber que el escepticismo organizado, es más solidario que el mezquino orbe de los gurúes de la “versoterapia” (léase Claudio María Domínguez, que curiosamente es columnista de Muy, Ari Paluch, etc.).
El gran viraje, lo constituye el poner manos a la obra. Ayudar a ayudar. Proponemos el “Programa Solidario de Cristian Leal”. Acudiendo al llamado de las comunidades sin recursos materiales, allí donde el calor del Estado ausente, ni los punteros asedian. Donde las palabras y el amor se dosifican, ahí estaremos siempre los escépticos metodológicos. Ah, por cierto, esos sitios donde no llegan los charlatanes de feria de Muy Esotérico. Ese es el Gran Viraje. Pensamiento científico, solidaridad y cosmovisión.
¿Será tal vez la conformación del Homo Sublimis (el hombre nuevo), del cual habla siempre en su obra —nuestro entrañable amigo— el biólogo y naturalista Ladislao Vadas?
Gustavo Contarelli
Referencias:
1) Diario Muy de Buenos Aires (25-10-11 – Año 1, Nro: 127) Ed. AGEA SA
2) Muy Esotérico: Primera entrega: “Hechizos para el Amor” La Torre, Jimena. Ed. AGEA SA. Se adjunta con el diario, dos ejemplares por semana.
Otros fascículos: “Rituales de protección para las buenas energías” / “Predicciones 2012 signo por signo” – de regalo con diario.
3) Phineas Taylor Barnum (1818-1891). Empresario circense americano, reconocido por sus célebres engaños en el mundo del entretenimiento. Fundó el célebre circo que lleva su nombre.
4) Efecto Barnum o Forer (por el psicólogo estadounidense Bertram R. Forer, que lo estudió y describió en 1948): también llamado falacia de validación personal o el “efecto Barnum”) Es la observación por la cual los individuos darán aprobación de alta precisión a descripciones de su personalidad, que supuestamente han sido realizadas específicamente para ellos. En realidad son generales y ambiguas, como para poder ser aplicadas a un amplio espectro de gente.
5) Charlatán de Feria: Con este nombre, se referían en la Edad Media, a los vendedores de ilusiones o milagreros, que pululaban por las grandes ferias de Europa. Vendían tónicos que “curaban” todo tipo de dolencias; hacían rituales para mejorar el clima, hasta pequeñas cirugías.
6) Código de Faltas, Ley 10.703 (Prov. Santa Fe)
Art. 81 (Ex 76). - Explotación de la credulidad pública. El que habitualmente y con ánimo de lucro explotare la credulidad pública o la fe religiosa interpretando sueños, adivinando el futuro, formulando profecías o predicciones o pretendiendo en cualquier forma la posesión de un poder sobrenatural, siempre que el hecho no constituya delito será reprimido con arresto hasta treinta días o multa hasta seis jus.
Art. 80 (Ex 75). - Publicidad ambigua. El que ofreciere servicios profesionales o efectuase publicidades o anuncios que sean capaces de inducir a error respecto a su formación profesional o que pudieran causar confusión acerca de la profesión ejercida con otra que no tuviere derecho a ejercer, será reprimido con multa hasta diez jus.
Texto / Infofotografías: Gustavo Contarelli