Este martes, Diego Bossio se reunió con los jueces de la Corte Suprema para intentar explicar la situación de la Anses. Allí, sin ponerse colorado, el titular de ese organismo aseguró que cumplir con los fallos “Badaro” y “Eliff”, que dispusieron la movilidad de las jubilaciones, implicaría un “déficit operativo” respecto de lo que recauda y paga, y que en ese caso se debería recurrir al Fondo de Sustentabilidad para afrontar los costos.
En ese sentido, Bossio explicó que todo el dinero que ingresa se gasta en prestaciones y describió los resultados positivos de haber ampliado la base de prestaciones, que desde 2003 a la fecha alcanza a sectores que ahora cuentan con una cobertura y con haberes de los que antes carecían.
Sin embargo, la realidad pareciera ser diferente, sobre todo si se tiene en cuenta el enorme gasto que destina el Gobierno a algunos conceptos como el Futbol para Todos, el desembolso en publicidad oficial y hasta el dinero que usa la Anses para financiar delirantes proyectos oficiales y caprichos de Cristina Kirchner.
Independientemente de esto, hay quienes aseguran que sí se puede pagar el 82% movil a los jubilados, si se acomodan algunas cuentas del Presupuesto Nacional.
Claudio Lozano, diputado nacional de Proyecto Sur, explicó en su momento a diario La Nación que, de acuerdo a un proyecto elaborado por su partido, hay diversas fuentes de financiamiento para hacerlo: "Por un lado, vendría de la utilización del superávit financiero de la Anses, en torno de los $ 8200 millones, luego de haber pagado la asignación universal por hijo, con lo cual no hay una contradicción. En segundo lugar, se plantea la necesidad de restituir las contribuciones patronales a grandes empresas a los niveles de 1993, cuando Domingo Cavallo las redujo; de allí vendrían cerca de $ 17.000 millones", aseguró el legislador.
"En suma —concluyó— tendríamos $ 25.200 millones, que equivale al costo neto de recomponer los haberes y garantizar que el mínimo se ubique en el 82% móvil del salario mínimo".
Oportunamente, la columnista de Economía de TDP, Nidia Osimani, hizo un análisis similar explicando cómo se puede lograr pagar ese porcentaje. "Existen sumas considerables en concepto de contribuciones patronales que no ingresan al sistema previsional desde 1993 porque las empresas han sido beneficiadas exceptuándoselas del pago de obligaciones en concepto de cargas sociales", aseguró en su nota.
Al mismo tiempo, explicó que la Anses “cuenta con un Fondo de Garantía de Sustentabilidad de unos 150 mil millones de pesos".
Como se ve, solo falta voluntad política para hacer justicia con los jubilados. Para otras cuestiones, como el arreglo de un baño por más de dos millones de pesos, el alquiler de un avión privado en 10 millones, el pago a barrabravas para ir a ver el Mundial o los tres salarios estatales de Mariano Recalde, no hay inconveniente por parte del kirchnerismo.
María Luisa Torres