El tema fue vuelto a poner en el tapete de la agenda nacional por el constitucionalista Daniel Sabsay en el polémico coloquio de IDEA, pero lo cierto es que ya en 2004 el periodista Christian Sanz difundió la duda por una fuente de primera línea, y fue en 2007 cuando se expusieron los documentos fraguados, las pruebas, más fuentes que desmintieron que la presidenta Cristina Fernández no era abogada y finalmente una denuncia penal por usurpación de títulos y honores, cajoneada por el -siempre ligado al poder de turno- juez Norberto Oyarbide.
Ahora, una nueva denuncia se presenta en los tribunales a raíz de este escándalo. Viene de parte de Juan Ricardo Mussa contra la propia Cristina, acusada de los delitos de “jactancia, configurativa del delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público y asociación Ilícita, “dado que si la apreciación buscada es que no existe el titulo, ha cobrado sueldos del Estado más de 20 años de forma absolutamente irregular”, dice la denuncia.
Mussa pide investiga la existencia “del analítico y su correspondiente título profesional a nombre de Cristina Fernández”, motivado por las declaraciones de Sabsay.
Mussa pide a su vez “la declaración testimonial al Rector de la Universidad a la que supuestamente participó en la confección del analítico y correspondiente título profesional a nombre de la Cristina Fernández”.