Una vez más, Venezuela concurrirá a las urnas gracias a la lucha en solitario de un pueblo que ya no teme, porque le han quitado todo.
Una vez más, nadie los ha ayudado desde el exterior.
El presidente Nicolás Maduro y varios gobernadores oficialistas ya aceptan que se efectuarán en 2017 los postergados comicios para elegir gobernadores y alcaldes de todo el país.
Hace dos años, una huelga de hambre puso al borde de la muerte al Coordinador General de Voluntad Popular, Leopoldo López, quién está preso injustamente desde hace más de tres años.
Ante la inminencia de su fallecimiento (había perdido más de quince kilos tras permanecer más de un mes sin comer) se vieron obligados a convocar a las parlamentarias.
La oposición arrasó el 6 de diciembre de 2015 al PSUV (Partido Socialista Unificado de Venezuela) y se quedó con dos tercios de los curules de la Asamblea Nacional. Los caribeños renovaban el cien por ciento de las bancas.
Tras la catástrofe comicial, el chavismo cambió de un plumazo a los integrantes del Tribunal Superior de Justicia y la radicalizó para que declararan como inconstitucionales todas y cada una de las normas votadas por la nueva cámara legislativa.
A pesar de haber desactivado al Congreso, Maduro necesitaba que el TSJ asumiera sus funciones, para poder endeudar a un país que ya liquidó sus reservas en moneda extranjera y en metales preciosos.
La "fujimorización" de Venezuela cayó muy mal a nivel internacional, pero ni sus vecinos americanos ni las democracias occidentales pasaron de meras quejas y lamentos de ocasión. No hubo ni una sola determinación real que afectara al narco-régimen.
Capítulo aparte para Argentina y el partido gobernante "Cambiemos". Utilizaron la crisis venezolana en medio de la campaña presidencial para confrontar con el Frente para la Victoria pero luego no pidieron de manera efectiva la Carta Democrática contra un regimen que, en apenas diez días de abril, cometió estas tres barbaridades:
1-Le dió un cimbronazo al parlamento, al que le quitó funciones y en muchos casos no le devolvió (especialmente, la capacidad que tiene ahora el TSJ para aprobar privatización de los pozos petroleros del país).
2-Reprimió con gases lacrimógenos muy potentes desde helicópteros las movilizaciones que protestaban por el auto golpe. Un joven estudiante de 21 años perdió la vida en uno de los feroces ataques de la Guardia y la Policía Bolivariana.
3-Declaró la proscripción por quince años del gobernador de Miranda y ex candidato presidencial Henrique Capriles, líder del partido Primero Justicia.
Para que no queden dudas: Venezuela va a votar este año porque la gente se apropió de las calles y el chavismo entró en pánico, a pesar de que continúa con la represión.
Las escenas de este lunes 10, donde se pudo ver a helicópteros de las Fuerzas Armadas disparando contra manifestantes al mejor estilo de Apocalypse Now, no se van a repetir con tanta facilidad.
Todos los mecanismos de defensa de la democracia en América han fracasado.
Desde su mansión en Palm Beach, Donald Trump se desentendió de la crisis de sus ex aliados, ya que EEUU se autoabastece de petróleo y ya no los precisa.
Ahora, les toca a los chinos usufructuar las reservas venezolanas (el 20 por ciento de los yacimientos que existen en el mundo).
¡Qué vergüenza que me da tener una canciller como Susana Malcorra!
¡Qué vergüenza que UNASUR, MERCOSUR, PARLASUR y OEA estén tan al pedo y sean tan cobardes!