No sorprende, porque ambos periodistas suelen destacarse por ser operadores de prensa más que por informar. Se trata de Horacio Verbitsky y Rolando Graña.
Ambos se encargaron de difundir una falsa noticia, que involucra al hijo de Elisa Carrió, como presunto integrante de una banda narco.
Primero fue Graña, quien mostró algunas fojas que serían parte del expediente conocido como “Operación Puff”.
Allí aparecería una supuesta llamada telefónica de Carrió al juzgado para dar a conocer que el canciller Jorge Faurie le había trasmitido que su hijo mayor, Enrique Santos, estaba detenido desde el 28 de febrero en México por integrar una banda de narcos.
Sin embargo, la información no era cierta: en la misma comunicación, la líder de Coalición Cívica advirtió que la noticia era falsa. Incluso ya había hablado por teléfono con su hijo.
De hecho, si las llamadas, si se hicieron, parecen inexplicables porque el tema no tenía ninguna vinculación con la Operación Puff, según concluye el portal Expediente Político.
Por si fuera poco, la Cancillería también terminó confirmando, a través de la embajada en México, que la noticia era falsa.
“Ahora nadie sabe de dónde vino la versión. Todos se echan las culpas. En el entorno de Carrió sospechan de la Policía Federal, que depende del Ministerio de Seguridad. El caso por ahora es investigado por la jueza María Servini”, culmina Expediente Político.