Al gobernador Alfredo Cornejo le gusta mostrar a la provincia de Mendoza como ejemplo de republicanismo. Generalmente en contraposición de lo que han sido los gobiernos kirchneristas, que han abusado del poder del Estado. En todo sentido.
Sin embargo, el mandatario mendocino nada tiene que envidiarles a Néstor y Cristina Kirchner. Basta ver cómo el mandatario mantiene cooptados los principales organismos de control, principalmente la Fiscalía de Estado, el Tribunal de Cuentas y la Oficina de Investigaciones Administrativas.
A ello debe sumarse el control que ostenta sobre la Justicia: los fiscales están sometidos a sus caprichos, avanzando contra puntuales “enemigos” y protegiendo la corrupción lacerante de los propios.
La tercera pata son los “grandes” medios, que a fuerza de millonaria pauta oficial callan todo lo que ocurre. No importa cuán grave sea. Es curioso, porque Cornejo suele aducir que carece de dinero para mejorar la salud, la educación o la seguridad, pero les bajó 5 mil millones de pesos a los alcahuetes de siempre en sus primeros ocho meses de gobierno.
Ello explica por qué debió ser un programa de televisión de Buenos Aires el que reflejó la realidad de lo que es la provincia. Aquello que los “grandes” medios locales no se animan a contar.
Se trató de “Telenueve Investiga”, donde quien escribe estas líneas dio cuenta de la preocupante situación que se da en Godoy Cruz, terruño de Cornejo. Allí el narcotráfico ha sentado sus bases para avanzar en su rentable negocio, con la complicidad de la política.
Diario Mendoza Today publicó la ubicación de los lugares donde se fracciona la droga y los bunkers donde luego se vende. También reveló los lugares donde se acopian las armas. Con lo que ello significa: los narcos tienen apuntado a este medio desde aquella revelación.
A pesar de la claridad de la información, nada se ha hecho al respecto. Ni un allanamiento, ni un operativo. Nada de nada. Sí en otros lugares, pero sugestivamente allí no. ¿Por qué se protege a esos narcos? ¿Acaso han puesto dinero en la última campaña? Imposible saberlo.
“Telenueve Investiga” rescató el mapa publicado por Mendoza Today e interpeló desde Buenos Aires al gobierno de Cornejo. Pero ni siquiera ello logró quebrar la voluntad del gobierno provincial a la hora de combatir la inseguridad. O al menos de dar explicaciones.
En aquel informe también se expusieron hechos de corrupción. Por caso, se reveló que hace unos años, cuando la minera Vale abandonó el manejo de la mina Potasio Río Colorado, Cornejo comenzó a diagramar lo que hoy es una realidad. “Con tan solo tres ex funcionarios de su elenco y dos contadores amigos del grupo, se quedaron con la mina que abandonó Vale y todos sus activos. La empresa dejó en el banco 30 millones de dólares, y más del doble en activos”, explicó el documento.
Y añadió que esa cuantiosa suma de recursos pasó a ser administrada por una sociedad anónima del Estado, a la que denominaron Impulsa Mendoza S.A. “En la dirección de la empresa hay funcionarios del actual gobernador, quienes aún deben rendir el billón de pesos que administraron y del que no hay presentado ni un papel”, según Telenueva Investiga.
Sin embargo, el negocio grande ha iniciado recientemente, con la llegada a Casa Rosada de Milei y la aprobación del RIGI: “Resulta que los dos síndicos de Potasio Río Colorado constituyeron una empresa el año pasado, denominada APELEG S.A., a la cual el gobierno de Mendoza le adjudicó 19 de los 34 proyectos mineros en la región más rica en cobre del país: Malargüe Distrito Occidental. No obstante, para que el negocio cierre desde el entorno de Cornejo buscan inversores en Canadá y Australia, para la exploración (que cuesta cinco millones de dólares por mina) y para su posterior explotación. Con el potencial minero disponible, el resultado económico por cada una de los 19 proyectos podría llegar a ser de nada menos que 150 millones de dólares”.
El final del informe no tiene desperdicio: “Un negocio impresionante para un gobernador que pertenece a la Unión Cívica Radical pero que de republicano tiene poco, y que para manejar la provincia nombró a tres exministros y correligionarios al frente de la Suprema Corte Provincial, y dispuso de una pauta publicitaria de más de 4800 millones de pesos para los ocho primeros meses del año”. Más claro, echarle agua.