El día 11 de marzo de 2009, Tribuna de periodistas publicó en exclusiva una denuncia contra la Dirección Nacional de Aduanas, por una millonaria defraudación al fisco (1), a través de medidas cautelares efectuadas por media docena de firmas . Allí se aseguró que "un grupo de empresas solicitó ante la Justicia Nacional en lo Contencioso Administrativo Federal, en febrero de 2009, media docena de medidas cautelares a efectos de que se levantaran dichas prohibiciones. (...) Y acá viene lo interesante: las cédulas libradas por cada uno de los juzgados llegaron al departamento Judicial de la Aduana, pero algunos abogados de esa dependencia 'omitieron' —¿neglicencia o por cohecho?— contestar las medidas cautelares, por lo que estas quedaron firmes y por lo cual las mercaderías 'prohibidas' finalmente ingresaron a territorio aduanero argentino, lo que causó una defraudación al fisco de aproximadamente 120 millones de dólares (valor aproximado de las mercaderías).
Los abogados responsables de contestar las medidas cautelares y no lo hicieron, a la época que llegaron las cédulas fueron: Raúl Bustos Cara, Subdirector General de Legal y Técnica Aduanera; Daniel González, Jefe del Dpto. Judicial de la Aduana; y Diego Calandria, Jefe de la División Causas Jurídico-Contenciosas".
Luego de publicada la investigación de marras —que provocó el inicio de un interesante expediente judicial—, sucedieron varios hechos: por un lado, se removió de su cargo al mencionado Bustos Cara, Subdirector de Legales de la Aduana (2), de acuerdo a la Disposición de AFIP N° 103/2009.
Posteriormente, el día 18 de marzo de 2009, Daniel González fue también "renunciado" del Departamento Judicial de la Aduana, el cual comandaba.
Finalmente, hace pocos días —el 7 de julio pasado— fue desplazado de su cargo el abogado Diego Calandria, conforme Disposición Nº 202/2009 dictada por la Subdirectora General de Recursos Humanos de la AFIP.
En tal sentido, sorprende sobremanera la férrea defensa que oportunamente han hecho altos funcionarios de la Aduana sobre los implicados en la denuncia mencionada. ¿Cómo se entiende que según ellos todo lo publicado haya sido irreal —Cartas documento incluidas— y al mismo tiempo hayan ido eyectando a los supuestos responsables de ese escándalo?
Incoherencias típicas del titular de la AFIP, Ricardo Echegaray... nada para sorprenderse.
Un botón de muestra
El día 1º de julio, exactamente 3 días después de la derrota kirchnerista del 28 de junio —frustrado por su no designación como Jefe de Gabinete—, Echegaray comenzó la "venganza" contra los jefes de la AFIP-DGI, desplazando a toda la cúpula, echándoles la culpa de la derrota y acusándolos de "no estar consustanciados con el "modelo K", a saber:
1) Analista de Sistemas Ana María Garrell (Legajo Nº 22.095/95) en el carácter de Subdirectora General de la Subdirección General de Recaudación;
2) Abogado Pedro Alberto Jáuregui (Legajo Nº 22.032/91) en el carácter de Subdirector General de la Subdirección General de Operaciones Impositivas Metropolitanas;
3) Contador Público José Norberto Degasperi (Legajo Nº 15.972/61) en el carácter de Subdirector General de la Subdirección General
4) Contador Público Juan Carlos Santos (Legajo Nº 29.165/54) en el carácter de Subdirector General de la Subdirección General de Operaciones Impositivas de Grandes Contribuyentes Nacionales;
5) Contador Público Carlos Alberto Martínez (Legajo Nº 28.828/06) en el carácter de Director Interino de la Dirección Regional Devoluciones a Exportadores.
Otro hecho vergonzoso de un personaje que ha llegado adonde llegó sólo por haber cajoneado una denuncia contra Néstor Kirchner en Santa Cruz en el año 2004.
Pan y circo.
Christian Sanz
(1) Ver https://periodicotribuna.com.ar:80/Articulo.asp?Articulo=5056
(2) En reemplazo de Bustos Caras fue nombrado el "pingüino" Eduardo Palomo, un "amigote" del ex director de Aduanas, Ricardo Echegaray.
(3) Ver Disposición Nº 326/2009