Contenidos sacados de contexto y la utilización de acontecimientos dolorosos, parecen bañar de confusión los rezagos de la guerra de Malvinas, gesta por demás aprovechada por el actual Gobierno.
En el año 2007 la causa radicada en el Juzgado Federal de Río Grande que guarda los malos tratos de ex combatientes de Malvinas por parte de sus superiores, fue histórica per se por encontrarse las islas en jurisdicción de Tierra del Fuego. Pero la gracia de la jurisdicción de dicha causa quedó en un total segundo plano cuando se abrió el debate sobre las formas en que se consiguieron dichos testimonios sobre torturas y vejaciones sufridas por los combatientes.
La causa se inició en abril del 2007 cuando el ex subsecretario de Derechos Humanos, Pablo Andrés Vassel, patrocinó a una veintena de ex soldados de esa provincia que fueron presentándose poco a poco ante la jueza Lilian Herraez. Sobre ella descansó la decisión acerca de si estas agresiones corresponderían a delitos de lesa humanidad —o no— por parte de sus superiores.
Vassel se encargó de obtener algunos testimonios en video, los cuales posteriormente fueron subidos a YouTube (ver al pie). Tal es el caso del testimonio recogido a Juán De
Lo raro del asunto es que Taranto fue el primer ex combatiente en visitar el cementerio de Darwin en el año 1999, ocho años antes de comenzado el curioso juicio. En el diario platense El Día del 9 de agosto de 1999, se lo menciona así: “José Taranto tenía 24 años cuando fue trasladado a Malvinas junto al resto del Regimiento de Infantería de Paso de los Libres. Ayer, con 42 años, fue el primer ex combatiente en visitar el cementerio de Darwin, donde están enterrados 137 soldados argentinos, muchos de ellos en tumbas sin nombre. En silencio y con los ojos congestionados por la emoción, el ex combatiente fue recorriendo cada una de las tumbas hasta que se detuvo en una, donde se agachó a decir una plegaria. Era la de un soldado que se llamó Arturo Fernández Remigio y pertenecía al 5 de Infantería.
"El estaba conmigo en Howard, donde compartimos el aislamiento, la falta de ayuda y los ataques ingleses -contó ayer Taranto-. Nunca nos llegaba la comida y de a poco nos íbamos sintiendo cada vez más débiles. Yo sobreviví, pero él se murió de hambre una tarde en un hospital de campaña. Tenía 19 años y su cuerpo fue traído a Darwin".
Tiempo después, Martins le explicaría en otro video al mismo Taranto que Vassel le habría ofrecido dinero para inculparlo. Así como Martins contó su testimonio en contra de Taranto en videos recogidos por el ex funcionario, así también otros fueron admitiendo la promesa de 250 mil pesos para inculpar a ciertos militares, entre esos Taranto.
Los ex combatientes admiten haber sido usados y manipulados para declarar en contra de sus propios compañeros por personajes que se aprovecharon de la dolorosa situación que viven los ex combatientes para su propio rédito político.
A continuación el video que aclara la falsedad que oscurece los juicos por torturas en Malvinas:
Eliana Toro
Hacé clic acá para seguirnos en Twitter