La Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) catalogó de "lamentables" las declaraciones del ministro de Economía, Amado Boudou, a quien acusó de "agraviar al periodismo", al tiempo que advirtió sobre un riesgo para "la salud democrática".
"Con frecuencia cada vez más preocupante, la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas tiene que lamentar manifestaciones de intolerancia y agravio al periodismo por parte de altos funcionarios del gobierno nacional", afirmó ADEPA a través de un comunicado.
El candidato kirchnerista a la Vicepresidencia disparó ayer en un acto en La Pampa un duro discurso contra los periodistas y directivos de Clarín y La Nación y se refirió a ellos como “profetas del odio y del fracaso”, antes de mencionar con nombre y apellido a los periodistas.
"Esta y otras expresiones recientes de ministros del Poder Ejecutivo, que insisten en acusar de desestabilizador a quien informa con independencia del discurso oficial, son un llamado de atención que la sociedad argentina no debe pasar por alto a fin de evitar nuevos riesgos para la salud democrática", agregó ADEPA.
“Queremos decirles con nombre y apellido, a (Joaquín) Morales Solá, a (Mariano) Grondona, a Jorge Rendo, a Julio Blanck, a (Eduardo) Van der Kooy y al jefe político de todos ellos, el señor Héctor Magnetto, que el pueblo no les cree, que el pueblo se cansó”, disparó el ministro. “Quiero decirle a todos esos periodistas que nombramos, los verdaderos periodistas militantes son ellos, son militantes en contra del gobierno, de la Argentina y de la unidad latinoamericana”, dijo el ministro.
El año pasado Boudou hizo declaraciones aún más desafortunadas cuando se refirió a dos trabajadores de diario Clarín y La Nación como los que “ayudaban a limpiar las cámaras de gas del nazismo”. Días después, las declaraciones tuvieron que verse rectificadas luego de una presionada disculpa pública por parte del joven funcionario, acompañada de un escalofriante silencio oficial.
Pero al parecer no está todo tan negro en la relación entre el eventual próximo vicepresidente y los dos matutinos más importantes del país, de hecho los únicos periodistas con los que Boudou tiene una correlación insalvable son con los que nombró en público; lo demás tal vez pueda arreglarse.
Según indica DsD hoy, luego de la victoria del oficialismo en las PASO, los lectores de matutinos tal vez no hayan llegado a percibir algunos imperceptibles cambios en la sostenida tensión entre el Grupo Clarín y la Casa Rosada, que ya lleva más de dos años.
Hasta hace casi dos meses, el diálogo entre el multimedios y la administración nacional no existía, en ninguno de sus niveles. Desde entonces hasta el presente hubo hechos que ningún matutino registró: desde algunos círculos de colaboradores del ministro de Economía y candidato a vicepresidente, Amado Boudou, comenzaron a generarse una serie de reuniones informales con diversos medios de comunicación.
Desde que Boudou fuera designado candidato a vicepresidente, algunos de sus colaboradores entendieron que debían tener diálogos más asiduos con periodistas, para que tuvieran información de “background”, sea de la propia gestión o de la política doméstica.
Las reuniones comenzaron con periodistas de medios afines al Gobierno nacional. Pero luego se extendieron a encuentros incluso con periodistas del diario Clarín. De ese diálogo, aseguran, no participarán nunca Julio Blanck ni Eduardo van der Kooy.
Hace unas semanas, el matutino correspondió con algunos títulos de portadas muy generosos, que hicieron recordar a la etapa de idilio entre el kirchnerismo y el “gran diario argentino”, entre 2003 y 2007.
El dialogo con La Nación ya se había reanudado mucho antes, en el mismo nivel y básicamente para suministrar información.
“Lo que en la Rosada casi nadie sabe es, si esa iniciativa del equipo del futuro vicepresidente, cuenta con el aval de la Presidenta de la Nación. Y menos aún si se trata de un primer cambio significativo, o de una anécdota con fecha de vencimiento”, dice el Diario Sobre Diarios.
Ahora los lectores deberán esperar estos “nuevos matices” a la hora de leer algunas informaciones.
Equipo de Política de Tribuna de Periodistas