Marcos Peña lo dijo con todas las letras hace un rato: "Hasta que se defina la elección, en octubre, va a haber inestabilidad".
Es bien cierto que aún faltan elementos concluyentes para sostener —o refutar— esa afirmación. No obstante, la victoria de los Fernández tendrá un impacto real y concreto en los mercados, imposible de mensurar en estas horas.
Coinciden el oficialismo y la oposición en que Alberto y Cristina son los claros vencedores. Discrepan, sí, en la diferencia. Pero ambos lo admiten.
Resta saber de cuánto será esa diferencia y a cuánto llegará el porcentaje alcanzado por el Frente de Todos. Porque, si ese valor llega al 45%, hay serias chances de que el kirchnerismo logre vencer en las elecciones generales al macrismo.
Por eso, hay que prestar atención a esos datos, que se traducirán, por carácter transitivo, a lo que este lunes reflejen los mercados. ¿Qué ocurrirá con el dólar y el Riesgo País? Son las principales dudas que a muchos carcomen en estas horas.
También habrá que ver qué ocurre en distritos como la provincia de Buenos Aires y Córdoba. Si allí perdiera el oficialismo, será un mensaje de alto impacto en el inconsciente colectivo, casi imposible de revertir en los comicios generales.
Por ahora, solo hay incertidumbre. En algunas horas, muchas de estas preguntas serán respondidas. Ello dará un poco más de certeza… mínima, pero certeza al fin.