"Se cumplen 18 años del secuestro y la desaparición de Marita Verón. Desde ese día su mamá, Susana Trimarco, la busca incansablemente", evocó este viernes Santiago Cafiero en su cuenta de Twitter.
Persiste de esta manera el apoyo irrestricto del gobierno hacia la figura de una mujer que ha hecho de la mentira y la trampa su nivel de vida. Cuyos desaguisados son investigados en sendos expedientes, uno de los cuales tramita en la Justicia Federal de Tucumán.
A pesar de ello —Trimarco se “birló” más de 23 millones de pesos que jamás rindió—, el gobierno de Alberto y Cristina persiste en bajarle más fondos públicos. ¿Cómo se entiende semejante conducta? ¿Por qué a pesar de todo le darán a la mujer aún más dinero?
Ya se ha comprobado que Trimarco inventa rescates de trata, que desvía fondos públicos en beneficio propio y que incluso ha mentido sobre la historia de su hija. ¿Entonces?
Veamos a grandes rasgos de qué hablamos cuando hablamos del caso Marita Verón. En una síntesis que omitirá más de lo que contará, por una cuestión de espacio.
Un 3 de abril de 2002 desaparecía en Tucumán María de los Ángeles Verón y su madre, Trimarco, comenzaba una historia que la llevaría a lugares que jamás nunca imaginó.
Fue después de denunciar que su hija había sido secuestrada por un grupo de tratantes de personas que la habían depositado en prostíbulos de La Rioja.
Su labor desde el primer día fue incansable. Fue a todos los medios y programa de radio y televisión y repitió una y otra vez la misma historia.
Con el tiempo, logró que el estado tucumano la auxiliara económicamente, al igual que varias empresas privadas. Casi seis meses después de que se evaporara Marita, la justicia descubrió que madre e hija hablaban por teléfono. Por lo menos lo habían hecho en una oportunidad, tal cual terminó confesando en el expediente la propia Trimarco e incluso su prima María del Valle.
Es un dato que la madre de Verón gusta ocultar, al igual que muchos otros. Sencillamente porque tiraría su estrategia abajo.
No se trata del único “secreto” que guarda la mujer, hay muchos otros, y también mentiras, contradicciones y ocultamientos que echarían por tierra el castillo de naipes que construyó a lo largo de los años y que le permitieron pasar de la pobreza extrema a la fortuna más sorprendente.
Todo ello aparece revelado en mi libro “Trimarco SA”, cuyas fuentes de información son irrefutables.
Porque se basa en el propio expediente judicial, documentos oficiales y entrevistas a personas que trabajaron con la madre de Marita Verón, entre otros tópicos. Por eso, Trimarco jamás me ha hecho juicio alguno, a pesar de las amenazas de sus abogados, Carlos Varela Álvarez y Carlos Garmendia.
He ofrecido en público y en privado al oficialismo de turno, no solo mi libro, sino también los documentos que respaldan todo lo que allí se cuenta. Pero no les ha interesado.
No debería sorprenderme, porque el gobierno gusta arrimarse más a los corruptos que a los honestos. No hay explicación para ello, es como el cuento nomás: es su naturaleza.
Se cumplen 18 años del secuestro y la desaparición de Marita Verón. Desde ese día @SusanaTrimarco, su mamá, la busca incansablemente.
— Santiago Cafiero (@SantiCafiero) April 3, 2020
La trata es crimen organizado y una de las formas de violencia de género.
Nuestro compromiso es que el Estado asuma un rol central en esa lucha. pic.twitter.com/3psY7wpGJi