Hace unos días, me crucé en televisión con el ex juez Federal Gabriel Cavallo —quien oportunamente logró llegar a ser camarista merced a la no investigación de ciertos funcionarios de la ex SIDE—, actualmente director General del diario de Jorge Lanata, Crítica de la Argentina.
En esa oportunidad, le pregunté cuánto vendía diariamente el periódico que él dirigía y por qué no era auditado por el Instituto Verificador de Circulaciones (IVC). Su respuesta fue una mera evasiva, que no dejó ninguna definición en claro.
Posteriormente, hablando con importantes directivos de otros medios de información, supe que la estimación de ventas de Crítica no superaba los 20 mil ejemplares diarios. Algunos incluso me aseguraron que no llegaba siquiera a los 10 mil ejemplares por día en promedio de ventas.
En ese momento entendí que, tal vez, ese había sido el motivo por el cual, en las últimas semanas, el periódico de Lanata venía publicando en tapa informaciones de dudosa calidad periodística con gran artificio y pomposidad. No importa que lo que se diga sea falso, todo sea por vender más.
Es el caso de la información aparecida ayer en portada de Crítica (1), asegurando que Sebastián Forza, uno de los asesinados en General Rodríguez en agosto pasado, era informante de la DEA en la Argentina. "La agencia de drogas de los Estados Unidos lo había reclutado a través de Julio César Pose, su guardaespaldas. Pose, en realidad, es un soplón de los norteamericanos que también trabajó para la SIDE", asegura Cristian Alarcón en una nota plagada de errores y contradicciones.
La única evidencia que muestra el diario para sostener semejante afirmación es la siguiente: "(Forza) desde enero andaba con Julio Pose, un buchón de la DEA". ¿Es eso suficiente evidencia acaso?
Alarcón no sólo desconoce cómo funciona la estructura de la DEA en la Argentina, sino que no tiene la más mínima idea de quién es Julio César Pose. De lo contrario, no hubiera dicho semejante cosa.
Como si esto no fuera lo suficientemente fantasioso, el periodista introduce una insólita oración a su crónica: "Una de las hipótesis (...) es que fue la propia DEA la que delató la 'colaboración' de Forza a los que luego ordenaron su muerte".
Un verdadero disparate.
Para concluir, otro anticipo
En el día de ayer, diario Clarín aseguró lo mismo que este periódico viene afirmando hace semanas (2). Veamos:
-Dijo Clarín ayer:
"El origen del conflicto tendría que ver con las dos toneladas de efedrina varadas en la Aduana desde el 21 de mayo. Entonces, la Sedronar (Secretaría Antidrogas) le quitó la licencia para importar esa sustancia a la droguería Drofarma, vinculada según fuentes del Ministerio de Salud a socios de Rubén Romano (un controvertido ex gerenciador del PAMI)".
-Publicó Tribuna el 19 de agosto (3):
"El 20 de abril de 2008, un cargamento de 77 kilos de efedrina fue secuestrado cuando iba a ser exportado a México. La maniobra fue desbaratada merced a sendos operativos encabezados por la Dirección Nacional de Aduanas y realizados en el Aeropuerto de Ezeiza y en un barrio céntrico de la ciudad de Buenos Aires (...) La no-salida de esa efedrina habría sido entonces la causa del triple asesinato".
-Clarín:
"¿El papel que habría tenido Leopoldo Bina en esta sociedad informal que mantenía con Forza y Ferrón? Distintos testimonios indican que sus amplios contactos en el puerto de Buenos Aires le habrían permitido acercarle al grupo la vía libre para sacar la efedrina del país".
-Tribuna:
"Leopoldo Bina (colaboró en la operación) gracias a los contactos familiares que posee en la Aduana".
Elocuencia aparte.
Christian Sanz
(1) http://criticadigital.com/impresa/index.php?secc=nota&nid=11359
(2) http://www.clarin.com/diario/2008/09/07/policiales/g-01755038.htm
(3) https://periodicotribuna.com.ar/Articulo.asp?Articulo=4243