En conversaciones anteriores, el ex comisario había defendido la labor del juez Federico Faggionato Márquez, pero ahora esa postura se tornaba insostenible. La verdad, tal cual fue mencionado en este periódico virtual, es que nadie quiere llegar a resolver esta espinosa causa. ¿El motivo? El enorme poder político detrás de lo sucedido. Veamos.
En las últimas horas, el juez de Garantías de Mercedes, Marcelo Romero, rechazó el expediente que investiga el triple crimen, al considerar "disfuncional" el traspaso de la causa. Poco antes, el juez porteño Rodrigo Pagano Mata, se había declarado "incompetente".
Antes de que sucediera todo eso, Tribuna de periodistas había anticipado que ningún juez querría hacerse cargo de la causa, debido a la enorme presión política que hay detrás del expediente de marras. Hay tres temas que se vuelven difíciles de sortear:
1-La posibilidad de asesinar a los tres "empresarios" no pudo haber existido de no haber habido una zona liberada por parte de la Policía bonaerense, la cual, a su vez, no pudo haber trabajado sin la protección política pertinente. A ese respecto, se habla de tres importantes políticos de la provincia, uno de ellos un ex senador que ha apadrinado a no pocos jueces, policías y fiscales. Paradójicamente, el juez Faggionato Márquez es uno de los magistrados "puestos" por el mencionado ex legislador.
2-Parte de los fondos de la campaña de Cristina Kirchner en el año 2007 fueron blanqueados a través de empresarios que no pusieron un solo peso, sólo su firma. Un tercio de las firmas que aportaron han sido droguerías que hoy se encuentran bajo investigación de la Justicia por las derivaciones del triple crimen.
Muchas de esas droguerías, pertenecen a importantes referentes políticos que han puesto oportunos testaferros al frente de ellas. En ese marco se entiende la presencia de personas tan jóvenes y endeudadas dirigiendo empresas millonarias.
3-Los principales sospechosos de la causa —aquellos que extrañamente no han sido llamados aún a declarar— están íntimamente vinculados, no sólo al juez Faggionato Márquez, sino también a tres importantes funcionarios del Poder Ejecutivo. El mero cruzamiento telefónico entre los mencionados, pondría en dificultades a más de un referente oficial.
Ergo, no hay manera de que el expediente pueda avanzar de manera independiente.
Justicia perseguirás
En los últimos días, este periodista declaró dos veces. El 29 de septiembre lo hizo en el marco de una causa por adulteración de medicamentos y otros negociados relacionados al PAMI, en el juzgado Federal a cargo de Julián Ercolini. Allí dio el nombre de funcionarios, empresarios y laboratorios medicinales que han hecho oportunos negociados en detrimento de la salud pública. Son datos que fueron aportados por el asesinado Sebastián Forza en el marco de la entrevista que tuvo con quien escribe estas líneas en mayo de 2008.
Poco después, el 2 de octubre, este cronista declaró ante la fiscalía Nacional de Instrucción en lo Criminal número 32, encabezada por la Dra. Ana María Yacobucci, en el marco de la causa judicial que investiga el triple crimen de General Rodríguez.
En ese acto, de acuerdo a lo ya publicado por Tribuna de periodistas, fueron aportados nombres que la Justicia debería investigar y se aseguró que el móvil del crimen estaba relacionado con la venganza de ciertos "empresarios" argentinos —no mexicanos— preocupados por el avance de Sebastián Forza en el marco de la exportación de efedrina a México y ciertos negociados con remedios onerosos.
Se puntualizó sobre ciertos personajes que, según este cronista, deberían ser investigados por la Justicia:
-Ibar Esteban Pérez Corradi: es a quien Forza había denunciado en dos oportunidades por amenazas y que la embajada de Estados Unidos ha sindicado oportunamente como el intermediario entre narcotraficantes mexicanos y droguerías vernáculas.
-Marcelo Abasto: titular de droguería Multifarma, también solía amenazar a Forza (1) y ostenta el mismo récord que él, ya que aportó dinero a la campaña presidencial y posee docenas de cheques rechazados por un total de $1.361.872,22.
Abasto tiene campos en Marcos Paz y es amigo personal de Luis Marcelo Tarzia, uno de los detenidos en el "laboratorio" de Ingeniero Maschwitz el 18 de julio pasado.
-José Luis Salerno: titular de Farmaz Group y empleador de Damián Ferrón, uno de los acribillados en agosto pasado. Es uno de los que estuvo en la primera reunión con los narcos mexicanos y luego dejó a Ferrón para que negocie en nombre de él. Detrás de la figura de Salerno se esconde un importante político de la provincia de Buenos Aires.
-Marco Aurelio Lailson: El verdadero jefe de Tarzia y los pobres mexicanos que la justicia encontró en la quinta de Ingeniero Maschwitz.
-Rubén Romano: titular de diversas droguerías, una de ellas Romalá, denunciada en el año 2005 por la titular del PAMI, Graciela Ocaña, por diversos negociados. Es a quien Forza sindicó como su "socio" en Megfarm y a quien le temía por supuestas amenazas de muerte.
-Carlos Torres: titular, junto a Héctor Lorenzo, de droguería San Javier, una de las más sospechadas por negociados con medicamentos y fuerte aportante a la campaña de Cristina Kirchner. Asimismo, habría importado grandes cantidades de efedrina en los últimos años.
La semana que pasó, ambos fueron señalados en el marco de una denuncia por "lavado de dinero" kirchnerista (2).
-Héctor Capaccioli, superintendente de Servicios de Salud y su "ladero", José Luis Salvatierra, interventor del Hospital Francés. Ambos fueron mencionados por Forza como "puente necesario" para hacer ciertos negociados relacionados con los fármacos y han manejado la oscura recaudación de la campaña de Cristina Kirchner en 2007.
Es dable recordar que, si bien Forza apareció como aportante en la campaña de marras, nunca puso dinero, sólo su firma.
Desinformación a la carta
A medida que avanza la causa judicial del juez Faggionato Márquez, se persiste en la desinformación respecto a quién es cada uno de los personajes que aparecen en la trama. A algunos se les da un status que no tienen y a otros directamente no se los menciona, como el caso de Marco Lailson.
Por ejemplo, uno de los que la Justicia aún no ha investigado como debe es Fernando Ventura García, amigo del mencionado Lailson y testaferro de algunos de los mexicanos comprometidos con el tráfico de efedrina. Hace unos días, el juez Faggionato Márquez lo excarceló asegurando que "no tenía ninguna vinculación con esta gente", sin haber hecho una mínima indagación sobre su persona.
Si lo hubiera hecho, sabría que Ventura García vive en León —justo en el lugar donde habita uno de los cárteles de droga más importantes— y muchos de los viajes que este hace a su familia en la zona de Cancún son pagados por Lailson.
Ambos —Ventura y Lailson— estafaron al recientemente detenido Jesús Martínez Espinoza y son los que guían parte de la investigación judicial que se lleva a cabo en estas horas en Campana, acusando a personas que no tienen el poder que se les asigna.
Otro de los personajes que la Justicia no ha investigado en profundidad es Pablo Florentín, quien aseguró —mintió— haber sido testaferro de Sebastián Forza. Florentín fue uno de los que estuvo presentes en el almuerzo que este periodista tuvo con Forza en mayo de 2008 y es el verdadero ideólogo de las reuniones con Tarzia a efectos de venderle una droguería. "Pablo (Florentín) se quiso cortar solo y quedarse con todo. Es un traidor que vivía a Sebastián como nadie", aseguró a este periódico un aterrado vecino de ambos.
-Jesús Martínez Espinoza: Aunque se lo quiere sindicar como narcotraficante, no lo es, y menos aún el "líder" de la banda. Posee negocios de distinta índole, como confección de artesanías y carnicerías, pero no tiene perfil de narco. Por caso, su hija exhibe diversas fotos de la familia en www.myspace.com/jessicapreciado20, algo que jamás permitiría un traficante de estupefacientes.
Finalmente, están los nueve mexicanos detenidos en Ingeniero Maschwitz, los cuales Faggionato Márquez intenta hacer creer a la sociedad que son narcos y en realidad fueron traídos al país engañados, asegurándoles que iban a trabajar de plomeros, carpinteros y fontaneros.
¿Quién los trajo? el mencionado Marco Lailson, a quien Faggionato Márquez no se atreve siquiera a mencionar por el vínculo que los une (3). Concluyendo
En los últimos días se han promovido docenas de allanamientos y detenciones que no condujeron a nada y sólo lograron que los medios vayan perdiendo interés en el tema.
Es difícil creer que Forza y sus "amigos" hayan sido asesinados por mexicanos que perdieron mucho más que lo que pudieran ganar. Por otro lado, ¿matarían a una persona por sólo 25 mil pesos? Pocos saben que Forza había ofrecido a sus acreedores un auto y otros bienes los cuales fueron rechazados por estos.
Lo cierto es que nadie se ha animado a llamar a declarar aún a Perez Corradi ni a los titulares de ciertas droguerías relacionadas, no sólo a la exportación de efedrina, sino también a los negociados con remedios adulterados. Por caso, ¿Qué espera la Justicia para indagar a Rubén Romano y Carlos Torres? ¿Qué interés hay detrás de estos para que nadie los cite?
¿Por qué se insiste en decir que hay dos líneas de investigación, cuando ambas son una sola: mafia de medicamentos e importación/exportación de efedrina?
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Christian Sanz
(1) Otro de los que amenazaba a Forza era un tal "Cali", cuya identidad investiga la Justicia en estas horas.
(2) Ver https://periodicotribuna.com.ar/Articulo.asp?Articulo=4409
(3) Ver https://periodicotribuna.com.ar/Articulo.asp?Articulo=4321