Luego de que la justicia sobreseyera a Lucila Frend en el marco del crimen de Solange Grabenheimer, cabe poner sobre el tapete una serie de cuestiones que los jueces parecen no haber tenido en cuenta a la hora de emitir su fallo judicial. Sin mencionar las interminables mentiras y contradicciones en los que incurrió la acusada, hay que destacar que:
-El perito Luis Kvitko aseguró que Solange fue asesinada alrededor de 24 horas antes de la revisión del forense en el lugar del hecho, es decir, cuando Lucila se hallaba en la casa. Para reforzar su teoría, el médico legista aseguró también que el crimen pudo tener una connotacion sexual, y mencionó que en este caso advirtió una pequena lesión anal.
-El médico Eugenio Aranda, el primer y único profesional que vio el cadáver, fue categórico en afirmar que el crimen ocurrió entre la 1 y las 7 de la mañana. A esos efectos, dio un dato fundamental e irrefutable a nivel científico: dijo que la vejiga de Lucila estaba vacía cuando el cuerpo fue hallado. Ello “hace suponer que la víctima murió cerca de la 1 de la mañana porque había miccionado antes de ir a dormir”, advirtió.
-El teléfono de Solange no registró las llamadas usuales que esta solía hacer a partir de las 8 de la mañana.
-El criminólogo Raúl Torre demostró que el asesinato lo cometió una persona "zurda", como Lucila. En sentido similar, el profesional refirió que el asesino poseería una personalidad psicopática, parecida también a la de la acusada.
-La hoy sobreseída Lucila juró que ese día intentó comunicarse varias veces por teléfono con Solange pero se comprobó que nunca la llamó ese 10 de enero. La prueba surge de los registros de Nextel al número 11554294779.
-Patricia Lamblot aseguró ante el tribunal judicial que el día del crimen de su hija, Lucila, sin que nadie se lo preguntara aseguró que "yo no fui" la autora.
-Patricia Ines Martínez Llenas, perita psicológica de Lucila aseguró a fojas 1229/55 que esta mostraba "contradicciones profundas entre lo que aparecía en el expediente y su presentación" personal. En tal sentido, aseguró que Lucila no prestó colaboración y que "se negó a pasar por el test de Phillipson, que es para ver cómo maneja las relaciones efectivas con los otros". Finalmente, dijo que observó rasgos de "mendacidad, de querer ocultar, no decir" por parte de la acusada.
-Todos los presentes en el velatorio de Solange coinciden en que Lucila era la única que no parecía shokeada y que jamás se acercó a la familia de la asesinada. También destacan el hecho de que llegó tarde y se fue casi inmediatamente.
-Según los testigos que estuvieron el día que asesinaron a Solange, Lucila denotaba mucho miedo porque su "amiga" no le respondía los llamados. Según ella, aún no había ido a su casa y obviamente no sabía que Solange estaba muerta, pero no solo mostraba temor extremo sino que supo describir parte de la escena del crimen que supuestamente no había visto. “Lucila tenía mucho miedo de ingresar esa noche. Antes de saber lo que había pasado, ella no quiso entrar a su departamento sola, quiso esperar a alguien que las acompañara, como el novio de Sol”, admitió la referida Lamblot.
-Tanto el novio de Solange, Santiago Abramovich, como sus primas, Mariana y Valeria Kohan, hablan de una Lucila fría, que, lejos de estar mal, hablaba sin cesar y tiraba hipótesis de lo ocurrido vinculando el crimen de su amiga con el enojo de un obrero, una mucama y hasta una venganza contra su padre.
-Lucila aseguró una y mil veces que su relación con Solange era óptima, pero todos los testigos que fueron llamados a declarar dijeron lo contrario, confirmando incluso que esta última no quería renovar el contrato de alquiler porque quería irse a vivir sola.
-En un correo electrónico presentado como evidencia en el expediente, enviado por Lucila a su novio, la acusada habló de "matar a Solange".
Estos y otros elementos son los que llevaron al fiscal Alejandro Guevara a pedir la condena de reclusión perpetua para Lucila Frend. Sin embargo, los jueces Oscar Zapata, Lino Mirabelli y Hernán San Martín, entendieron que esto no era suficiente y decidieron absolverla. En realidad, se basaron en ciertas ineficiencias cometidas por los primeros peritos que investigaron el caso y en puntuales contradicciones entre otros profesionales. Fue la brillante estrategia que planteó la defensa de Frend, sobre la base del célebre "in dubio pro reo"; es decir, cuando hay dudas respecto a un hecho delictivo, esta debe beneficiar al acusado.
En fin, por lo ocurrido Patricia Lamblot ha decidido apelar la decisión del Tribunal Oral en lo Criminal y llevará su reclamo a una segunda instancia. Si cabe el consejo, este humilde periodista invita a indagar a la Justicia sobre la figura de Lucía Casal, amiga de Lucila, quien envió un críptico mensaje a través de su cuenta de Messenger pocos días despues de que fue asesinada Solange: “El 10 sucedió lo esperado”.
Esa podría ser la clave para llegar a la verdad finalmente.
Christian Sanz
Twitter: @cesanz1