Este jueves, la jueza federal Sandra Arroyo Salgado insistió con que a su exesposo Alberto Nisman “lo mataron".
Al mismo respecto, añadió que, por más que esa fue la suposición de la familia desde un primer momento "ahora lo confirman las conclusiones del exhaustivo informe pericial" que realizó el equipo de expertos que contrató para investigar el deceso.
A su vez, Arroyo Salgado resaltó que el informe que elaboraron sus peritos determinó que "no existió espasmo cadavérico porque hubo agonía" en el fiscal Alberto Nisman, fallecido hace más de un mes de un disparo en la cabeza.
En ese punto, mostró diferencias entre sus pericias y las oficiales al advertir que "se afirmó en la autopsia oficial que tenía espasmo cadavérico en mano de derecha" lo que lleva a pensar en "un signo suicida" pero la jueza advirtió que "ese signo no existió" en el cuerpo de su ex marido.
La jueza federal de San Isidro destacó que el deceso de su ex marido "impactó de lleno en la institucionalidad de la república".
Y señaló: "Nisman no sufrió un accidente, no se suicidó, lo mataron. Es un magnicidio de proporciones desconocidas".
Arroyo Salgado presentó en un teatro de San Isidro las "conclusiones" a las que junto su equipo de peritos "llegamos después de un mes de trabajo" y remarcó que "fue muy doloroso para nosotros".