Daniel Hadad gusta florearse como si fuera el adalid del periodismo y la libertad de expresión. Sin embargo, carga en sus espaldas con un historial de trapisondas de diversa índole.

Más allá de sus vínculos con el narcolavador Alfredo Yabrán, quien supo comprar su silencio y complicidad con 80 mil dólares mensuales durante los años 90 —tal cual revelo en mi libro “La larga sombra de Yabrán” (Sudamericana/1998)—, el hoy dueño de Infobae se destaca por la fuerte presión hacia los periodistas que trabajan con él, ya sea para que hagan puntuales operaciones de prensa o para que callen ciertas informaciones.

Como botón de muestra se puede mencionar lo ocurrido con los cuadernos de Oscar Centeno, donde Hadad aparece mencionado por ser uno de los receptores de los sobres de la corrupción. Sin embargo, en Infobae hizo borrar toda mención a esa espinosa cuestión. Esa conducta no es la excepción, sino la regla.

Me hago cargo de mis dichos, ya que tengo trato cotidiano con la mitad de los que escriben en el portal de Hadad. Quien me siga en Twitter puede comprobarlo fácilmente.

Como sea, toda esta perorata es para contar lo ocurrido este jueves, luego de que TKM levantara de todas sus redes un video que parodiaba a Clarín y su “ocultamiento” de la pobreza en días de Macri, aquello de lo que habló Tribuna de Periodistas en esta nota.

La situación quedó expuesta en las redes sociales, donde miles de tuiteros salieron en coro a repudiar lo ocurrido.

Uno de ellos, Martín Herrera, sostuvo: “TKM, la página propiedad de Hadad para la q trabaja el pibe autor de este video espectacular sobre de la complicidad entre medios y el gobierno acaba de levantar el video de su página y redes sociales. Mejor final que una censura no me imagino”.

En ese contexto, TDP decidió subir los videos a su página de Facebook y las replica en esta misma nota, acaso a efectos de vencer la censura. Nada más que agregar: