Alberto Fernández sorprendió a propios y ajenos este sábado luego de decidir una suba de retenciones al campo totalmente inesperada e inconsulta.
Ello provocó un fuerte malestar entre los productores, tal cual reconoció el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Daniel Pellegrina. "La medida cayó muy mal", sostuvo el referente, al tiempo que estimó que la decisión significará una pérdida de "USD 1.800 millones adicionales" para el sector y advirtió que perjudicará a los productores del interior del país.
En ese contexto, la Mesa de Enlace se reunirá de urgencia este lunes para definir cuáles serán los pasos a seguir ante lo ocurrido. Ciertamente, es una decisión que inquieta al gobierno. ¿Y si se convierte en una remake de lo que fue la "guerra" entre el campo y el kirchnerismo en el año 2008? Es la pregunta que se hacen desde el ala más dura.
Puntualmente, preocupó una frase que se deslizó en el comentario de Pellegrina, al final de su alocución: "Vamos a tener una reunión la semana para ir evaluando qué hacer porque hay malestar en los productores agropecuarios, sobre todo del interior de Argentina. Y algunos sectores son más protestones que otros".
Muchos recordaron entonces las palabras de Horacio Verbitsky, quien alertó hace un mes sobre un "golpe de Estado" contra el presidente electo Alberto Fernández por parte del campo (ver al pie).
Fue al referirse a la situación de Bolivia y al recalcar que "es cierto que no se trató de un golpe de estado tradicional, hay elementos novedosos. Pero no es casual que esto siempre pase en la medialuna (...) Y ese alzamiento de la medialuna fue en simultáneo con el alzamiento de la Sociedad Rural en 2008 en la Argentina, y que la Sociedad Rural está amenazando ya con volver a la calle si se tocan las retenciones".
¿Preparó Verbitsky el terreno para lo que se venía? ¿Acaso alguien le pidió que lo hiciera? Más aún: ¿Ya estaba en la mente de Alberto Fernández la posibilidad de tocar el esquema de retenciones?
Todo indicaría que sí, porque durante la entrevista, de 30 minutos, el periodista repitió tres veces que la SRA "está amenazando con volver las calles". Y las casualidades no existen... al menos no en la política.