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Infierno en Salta

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EL PODER, LA DROGA Y UN NEGOCIO QUE NO DEJA DE CRECER
EL PODER, LA DROGA Y UN NEGOCIO QUE NO DEJA DE CRECER

Hace unas semanas desde este sitio comentamos los detalles del asesinato de Liliana Ledesma en la provincia de Salta y anticipamos los nombres de algunos de los involucrados en su muerte, muy cercanos al poder político de esa provincia. Dijimos entonces que, si bien para los medios y la gente en general, sólo era una vendedora de huevos de 39 años, Ledesma en realidad era "informante de algunas fuerzas de seguridad salteñas en temas de drogas" (1).

 

Esta semana, la Brigada de Investigaciones de Tartagal detuvo a dos hombres sobre quienes pesaba un pedido de captura librado por el juez de instrucción Nelson Aramayo, lo cual se suma a la detención de María Gabriela Aparicio, hermana del diputado Ernesto ídem, señalado por varias fuentes como instigador del crimen de Ledesma. Este periodista ha tenido la posibilidad de entrevistar al menos a cuatro testigos off the record que han confirmado la posibilidad de que el legislador estuviera involucrado en el negocio del narcotráfico.

"Aparicio es testaferro de Delfín Reynaldo Castedo, ese personaje que nombraste en tu primer artículo. Entre todos y cubiertos por el gobernador (Juan Carlos) Romero tienen una aceitada red de envío de drogas a Europa, es droga que viene de Bolivia. Liliana Ledesma estorbaba estos planes y por eso la quisieron aleccionar (...) no querían matarla pero la cosa se les fue de las manos y aprovecharon para dejar un mensaje mafioso ¿Quiénes fueron los instigadores? La hermana del diputado Aparicio y su cuñado", admitió uno de los informantes consultados.

Recordemos que existen testigos que aseguran haber visto a ambas mujeres (Ledesma y Gabriela Aparicio) discutiendo el mismo día en que se produjo el homicidio, algunos de ellos dicen que fue Aníbal Ceferino Tárraga -concubino de Aparicio- quien estuvo con la "vendedora de huevos" antes de que la ultimaran. 

En consonancia con lo publicado por este periódico esta semana una comisión de efectivos de la Brigada de Investigaciones de Tartagal detuvo a Tárraga y un amigo de él, Lino Abdemar Moreno como los supuestos asesinos de Ledesma.

Según cuenta el diario El Tribuno de Salta "Tárraga y Moreno, el segundo con antecedentes penales y quien se había escapado de la Unidad Carcelaria 5 de Tartagal dos años atrás, estaban durmiendo dentro de una precaria vivienda, ubicada a la vera del río Pilcomayo, a 800 metros del punto tripartito donde concluyen las líneas demarcatorias territoriales de Argentina, Paraguay y Bolivia y a 10 kilómetros de Santa Victoria Este, en un puesto conocido como 'Costa Rica' cuando fueron sorprendidos"

Luego de estas detenciones, la pregunta fue inevitable ¿Se acabó la "sociedad" de esta gente?


La línea blanca

El día 27 de octubre pasado personal de la dirección de Drogas Peligrosas de la Policía de Salta secuestró casi 58 mil kilos de cocaína de máxima pureza por orden del Juez Federal de Orán, Raúl Reynoso. Según pudo saber este periodista, quienes se encuentran detrás de la operación serían las mismas personas que aparecen en medio del escándalo por la muerte de Liliana Ledesma y que estuvieron relacionadas en su momento al operativo conocido como Carbón Blanco.

Hablamos de Ernesto Aparicio, Defín Castedo, su abogado Carlos Salvatores (jamás investigado, inexplicablemente) y Diego Corzo, deschavado por este periodista como el sicario que liquidó a Poli Armentano en Abril de 1994 (2). 

Según todos los testimonios recogidos por quien escribe estas líneas, los mencionados -junto a otros personajes cuyos nombres aún no pueden revelarse- integran un productivo joint venture dedicado al tráfico de estupefacientes, siempre protegidos por el poder político vernáculo.

"¿Vos te crees que es casualidad que todo pase en Salta? No lo es, creeme. Estos tipos hasta tienen protección de un funcionario del Poder Judicial de Tartagal de apellido Acosta. La joda viene desde lo más alto del poder", confió a este periodista una de las personas entrevistadas.

Es difícil creer que todo sea parte de la casualidad permanente. Mirando retrospectivamente, Salta es una de las provincias donde más secuestros de drogas se han hecho a lo largo de los años. A pesar de esto, el silencio oficial jamás se quiebra y nunca se escuchan voces escandalizadas por el creciente negocio, al menos en el ámbito político.

De tan evidente la cosa se vuelve pueril: un gobernador con antecedentes de beneficiar al narcotráfico (3), secundado por personajes que han sido salpicados de diversa manera bajo el mismo estigma. La ecuación es casi matemática: la droga nunca deja de estar presente. ¿A qué se debe?

El tráfico de drogas es uno de los negocios más rentables del mundo (mueve 600 mil millones de dólares al año en todo el mundo) junto al tráfico de armas. La droga, que se compra a bajo precio en lugares como Bolivia o Perú incrementa su valor exponencialmente cuando ingresa al mercado europeo.

A su vez, Salta posee condiciones únicas para hacer rentable el negocio, ya que limita con Bolivia uno de los países productores de estupefacientes más prolíficos. Esto permite que se puedan "pasar" estupefacientes de un país a otro casi sin control, sobre todo desde la localidad de Salvador Mazza (Ver mapa al pie). 

En ese sentido, en nuestro artículo anterior comentábamos que el legislador Aparicio "siempre fue una figura controversial y su actividad la desarrolló en Salvador Mazza ciudad fronteriza con Bolivia, puerta de entrada de la droga que llega del vecino país".

Allí, las fuerzas de seguridad parecen ser bastante permeables al "arreglo" con los narcos, lo cual se suma a las constantes denuncias de aterrizaje de avionetas en pistas clandestinas pertenecientes a campos de conocidos actores de la política y el poder salteño.


Concluyendo

Hace dos años, desde este periódico comenzamos a preguntarnos por qué el presidente Néstor Kirchner daba cabida en su gobierno -y en lugares clave- a personajes sospechados de estar vinculados al narcotráfico. Ese interrogante, que hicimos público en las virtuales páginas de Tribuna de periodistas, provocó que los funcionarios señalados nos enviaran sendas cartas documento para rectificar la información publicada y que un ministro de la Nación nos querellara.

Las cartas documento fueron respondidas ratificando todo lo escrito y en la querella efectuada por el ministro se demostró que no hubo calumnia alguna por parte de este periódico. Aún así nadie ha aclarado suficientemente este tema ni ha explicado por qué se sostiene a ciertos funcionarios en cargos tan importantes.

Por mucho menos de lo que ha sucedido en Salta se ha intervenido la provincia de Santiago del Estero ¿Qué pasa en este caso que nadie se anima a hacer o decir nada? 

¿Se tratará acaso de idiotez, complicidad o sociedad?

 

Christian Sanz

(1) Ver https://periodicotribuna.com.ar/Articulo.asp?Articulo=2494

(2) Ver libro Poli Armentano, un crimen imperfecto (2003)

(3) Ver https://periodicotribuna.com.ar/Articulo.asp?Articulo=797

 

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