El pasado 5 de mayo, fue detenido Gabriel Brito en el marco de la denominada “mafia de los medicamentos”. Meses antes, el empresario había comenzado a “prender el ventilador” respecto a los irregulares aportes de campaña de Cristina Kirchner en 2007 y sus vínculos con el triple crimen de Gral. Rodríguez.
Oportunamente, ante este cronista, Brito reconoció haber entregado 4 cheques que fueron a parar a la campaña del Frente para
Luego de varios intentos fallidos por visitarlo en la cárcel de Ezeiza, donde purga su reclusión, quien escribe estas líneas logró entrevistar a Brito de manera telefónica.
-¿Cómo es su vida en la cárcel?
-(con la voz quebrada) Paso 23 horas encerrado en un pequeño lugar. Tengo sólo una hora para hacer todo lo demás: hablar por teléfono, bañarme y demás. En este preciso momento estoy usando ese beneficio.
-¿Por qué está en esas condiciones de encierro?
-Supuestamente es para protegerme, pero es obvio que me están castigando. Donde me encuentro, le dicen la “Cajita Felíz”, porque es chiquito el lugar. Nadie se puede acercar a mi celda, donde encima estoy completamente solo. También está prohibido que alguien me hable.
-¿Por qué dice que lo están castigando?
-Por todo lo que estoy viviendo. Por ejemplo, nadie puede venir a verme. Cuando alguien quiere hacerlo, le ponen trabas. Me aislaron por completo. No puedo hacer nada, tengo quilombos económicos. Perdí a mi familia… perdí todo.
-¿Sigue el expediente de los medicamentos desde la cárcel?
-Sí, pero ya se torna obvio que están entorpeciendo toda la investigación. No quieren llegar al final del asunto porque está muy comprometido el propio kirchnerismo. ¿Cómo es que estoy preso yo y Cappaciolli (Héctor, ex superintendente de Servicios de Salud) ni siquiera fue citado por Oyarbide?
-Tengo entendido que
-Sí, por eso te digo. Es una vergüenza. Acá tienen que dar explicaciones Cappaciolli, (Sebastián) Gramajo, y otros funcionarios del kirchnerismo. Las cooperativas que participaron de todo esto también. Esto es impunidad total.
-¿Podría decirse que usted es el “chivo expiatorio” de toda la trama?
-Sin dudas, Christian, este es un mensaje para que nadie más hable del tema. Es como decir “el que habla, va preso”.
-¿Tuvo algún mensaje por parte del gobierno últimamente?
-No, sólo los primeros días de encierro, pero ahora no.