La agencia de noticias Télam pertenece al Estado nacional; esto significa que su mantenimiento es solventado por todos los argentinos. Sin embargo, su trabajo no es plural ni objetivo, sino claramente a favor del kirchnerismo y contra sus enemigos de turno.
Jamás se destacará en sus cables logro alguno de opositores de la talla de Elisa Carrió, Francisco De Narváez o Mauricio Macri. Ni hablar de Eduardo Duhalde, quien directamente ni figura en sus coberturas.
En sentido contrario, los pequeños logros oficiales son multiplicados y exagerados de manera desproporcionada, para mostrar una gestión supuestamente exitosa en torno al matrimonio Kirchner.
Tal es así que, si uno leyera sólo Télam como medio de información diario, jamás se enteraría de escándalos como los fondos de Santa Cruz, las coimas de Skanska, las valijas con drogas de Southern Winds o los negociados con Venezuela. Todo allí es color de rosa.
Como botón de muestra, puede citarse lo que aparece hoy mismo en la portada principal de la oficiosa agencia. “Luego de las gestiones de Kirchner, los presidentes de Colombia y Venezuela se reunirán para normalizar las relaciones”, reza el título más importante de su home, en un intento del kirchnerismo por arrogarse el éxito de la gestión de acercamiento entre los mandatarios Juan Manuel Santos y Hugo Chávez.
Cabe preguntarse: ¿Puede un medio de comunicación ser tan caradura a la hora manipular la información? ¿Se puede abusar de tal manera de la credibilidad social?
SI bien es cierto que existen empresas informativas que operan a favor de sus propios intereses —lo cual es más que condenable—, en el caso de Télam la situación se agrava por el hecho de que su sostenimiento económico corre por cuenta de la propia sociedad.
No es un dato menor, toda vez que la mayoría de sus periodistas son los mejores pagos en el mercado de los medios, actualmente deprimido a nivel salarial.
Si a los onerosos sueldos de los popes de Télam se suma el costo de programas como 6,7,8, el escándalo se vuelve mayúsculo. Se trata de millonadas de dinero que sólo se justifican por la necesidad del kirchnerismo por perpetuarse en el poder.
Más que nunca: pan y circo.
Christian Sanz
A pesar de la seriedad de la nota, se puede decir que en Argentina hay gente feliz y otra que sabe la realidad. Lástima que esta gente feliz opina y vota.
Christian : Investigá sobre las PAUTAS PUBLICITARIAS que "paga" Télam mediante contratos clientelares. Desde verdaderos suelditos para punteros, como grandes pautas que NADIE VERIFICA. La LEY MORDAZA (nueva ley de medios K) sólo va a AGRANDAR EL MANEJO DE LA INFORMACION, LOGRANDO LA "VENEZUELIZACION" DE LA INFORMACION. El que hable mal de la gestión del gobierno, le van a quitar la licencia a los dos años. VERGONZOSO!. Saludos, Juan.
"¿Puede un medio de comunicación ser tan caradura a la hora manipular la información?" Cristian vos te hacés esta pregunta? No sólo Telam lo hace. TODOS manipulan, se lo podés achacar a Telam, tambien lo hacen Tiempo Argentino y toda esa gama de diarios oficialistas (hay que reclacarlo?) o desde varios radios (sin ir más lejos, de tu admirado VHMorales). Como así también lo hacen Clarin, La Nación o desde Página 12 mismo Saludos, Hugo
Es atroz el manejo de la pauta publicitaria en nuestro país,sobretodo en la radio......teniendo en especial cuenta que aquellas que no la reciben,van languideciendo y comprometiendose económicamente........ffinalmente "se acercan" los "salvadores",que permanecian agazapados y dan el "uñazo" final......¡claro....! con ingeniería legal y sociedades impecables.