Ramiro Tagliaferro es desde 2007 diputado provincial por el PRO, también es el esposo de María Eugenia Vidal, vicejefa electa de gobierno porteño 2011.
Tagliaferro fue observador de las elecciones venezolanas invitado por el Instituto republicano norteamericano, acusado de “pregolpista” contra Hugo Chávez en 2002, el presidente Jean-Bertran Aristide de Haití en 2004 y el hondureño Manuel Zelaya.
El diputado además es licenciado en ciencias políticas de la ultraconservadora Universidad Católica Argentina (UCA); con estos antecedentes podemos entender por qué Mauricio Macri lo eligió como su delfín, digitándolo a toda “dedocracia” aunque Ramiro no tenga ningún antecedente político en zona oeste.
El “elegido” macrista basó siempre su fallido proyecto a intendente de Morón en la seguridad y también en un marketing costoso de mega-afiches de altura en los puntos neurálgicos del distrito. Tiene y tuvo relaciones veleidosas con Horacio Rodríguez Larreta, Francisco de Narváez y otros referentes de ese espacio político-ideólogico. Es amante de las fotos al costado de Macri y de cada evento Pro que haya existido.
Salto al vacío: volver al pasado para asegurar un futuro incierto
Tagliaferro, en una decisión sorpresiva, abandonó a su tropa y su proyecto a intendente y se pasó al duhaldismo para ser segundo candidato a diputado provincian y salvar su pellejo. Las encuestas le daban nulas chances locales (y Ramiro ni respira si no consulta encuestas); a causa de este traspaso, dos de los tres consejales de Unión-Pro —Marcelo González y Vanesa Sosa— constituyen el bloque “Unidos por Morón”. A partir del 14 de julio, éstos ingresan así al Frente para la Victoria local.
Tagliaferro dijo en marzo de 2010 que “Eduardo Duhalde cumplió un ciclo”, pero no vaciló en dejar sus militantes barriales y abrazar —según él— al duhaldismo del pasado; en las primarias obtuvo un magro 5,49 % en Morón, menos que en provincia. Dirigentes duhaldistas temen perforar el piso de 4% en las elecciones de octubre, y observan con desdén y desconfianza esta conversión coyuntural de última hora. Ramiro puede arrastrarlos al infierno tan temido.
Becas escolares y millones de razones PRO
El marido de María Eugenia Vidal maneja en becas escolares y subsidios unos $ 80,000 mensuales provenientes de la Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires. Sus ex colaboradores lo acusan de utilizarlas para un clientelismo inescrupuloso a cambio de votos, estas becas-cheques son repartidas a diestra y siniestra por Marcelo Chumbita, un gris abogado ahora cuarto candidato a concejal duhaldista.
Además Tagliaferro mantiene un oneroso staff de operadores políticos, diseñadores web, asesores, amigos y punteros. En concepto de becas, Tagliaferro recibió desde 2007 a 2011 $3.840.000 para alimentar a su equipo.
Las becas son utilizadas más intensamente en períodos electorales y oscilan entre 3 a 4 dígitos promedio; la caja parece activarse a favor de dicho plantel aunque el propósito original de las becas es la ayuda escolar a chicos carenciados. ¿Algún funcionario macrista podrá explicar semejante despilfarro?
Ludopatía y erarios públicos: conflictivo maridaje
En círculos íntimos del diputado reconocen la ludopatía feroz de Tagliaferro: el juego y la timba mayor lo tienen el borde del colapso. Por caso, durante el verano pasado en un viaje a Nueva York, el niño mimado de Macri realizó una incursión en los casinos de Las Vegas donde perdió unos 100.000 dólares. Dicen que esto es muy frecuente. Sus frenéticas noches de juego al límite de la billetera en el casino de Puerto Mdero, Mar del Plata y otros son proverbiales entre sus círculos de amigos.
Tagliaferro tiene niveles de vida ostentosos muy pocos disimulados: posee un Mercedes Benz blanco y una propiedad lujosa en San Pedro al 1.200 de Castelar.
Fuentes consultadas aseguran que también posee un importante patrimonio inmobiliario off shore; es legítimo preguntarse si son dineros propios o ajenos.
Ñoquis del 29: privilegios para los “amigachos” PRO
Existe una larga lista de personajes “mensualizados” por Ramiro, beneficiados desde el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y del Ministerio de Desarrollo Social del gobierno de la Ciudad a cargo de su esposa. Entre los “suertudos” se encuentran Carlos Rebagliatti (Charly el contador); Eduardo Demichelli, Adela Jovanovich (la gitana), Liborio Eduardo (ex asesor cavallista), Adolfo Bevaqua, Jorge Salomón, Walter Buceta , Damián Mayan y otros con sueldos ñoquis que oscilan entre los 5.000 y 10.000 mensuales.
Otro beneficiado es Diego Llaneza, quien tiene una denuncia en el juzgado Federal de 1º instancia de Quilmes, causa 258/2, con una orden de registro domiciliario, requisa vehicular y pedido de detención, causa pendiente de resolución y “cajoneada” convenientemente.
Los “ñoquis”, según fuentes de relevancia, se contarían por decenas. Como puede verse, la nueva política pregonada por Macri, en este caso al menos, hace agua por los cuatro costados.
¡No va más! Las últimas fichas antes de la bancarrota
La primera parte de esta investigación periodística abre la brecha para posibles causas judiciales y pedidos de juicio político contra Tagliaferro. El clientelismo burdo de la política vieja, el manejo de caja y los eternos ñoquis son solo la punta del iceberg que se esconde bajo la vida y gestión del diputado macrista.
Habría que preguntarle a Mauricio qué piensa hacer al respecto. Es lo menos que merecen los contribuyentes porteños y provinciales que bancan con sus impuestos los privilegios del poder.
Por ahora los PROblemas están a la vista.
Pedro Alejandro Ivanoff