Esta semana, el gobierno mendocino presentó en la Legislatura de esa provincia un proyecto de ley que propicia el "endurecimiento de sanciones para conductores ebrios", a través de la retención del vehículo, arresto y la aplicación de multas de hasta $108.000 para quienes conduzcan con más de 0,5 grados de alcohol en sangre (el proyecto puede verse al pie).

La idea no es aplicar la "tolerancia cero", sino que se permita manejar vehículos con hasta 0,5 gramos de alcohol en sangre. Ciertamente, es lo mismo que ocurre hasta ahora, solo que se endurecen las sanciones.

El proyecto prevé que aquel conductor que arroje más de 500 miligramos y hasta 1 gramo de alcohol en sangre, sea pasible de una multa que va desde 3.000 Unidades Fijas (UF) hasta 6.000 UF, a la fecha $ 36.000 a $ 72.000, respectivamente.

Además, como se dijo, la autoridad de aplicación podrá retener el vehículo y la licencia de conducir. Incluso se será pasible de la inhabilitación por hasta 180 días para manejar.

Entretanto, el que conduzca con un gramo o más de alcohol, tendrá un juicio donde arriesgará las siguientes penas: multa de 4000 a 9000 Unidades Fijas ($12 la UF), a la fecha $48.000 a $108.000, o arresto, el que será de hasta 30 días y la inhabilitación para conducir vehículos desde 90 a 365 días.

El proyecto ya ingresó a la Cámara de Diputados de Mendoza y se espera que la próxima semana pueda tratarse en la Legislatura provincial, en tanto que para incorporar estas sanciones se modificarán el Código de Faltas y la Ley de Tránsito.

"Si vos mirás el proyecto, de los 0,5 a los 0,99 gramos sigue todo igual, por lo que indica la Ley de Tránsito. A partir de 1 gramo, cambia la jurisdicción y pasa al Código Contravencional, por eso se puede incorporar el arresto. Uno cae en un juez de Faltas, lo otro va al juez Vial", dijo a Tribuna de Periodistas Néstor Majul, subsecretario de Relaciones Institucionales del Ministerio de Seguridad de Mendoza.

-Alberto Silveira, de "Luchemos por la Vida", dice que hay accidentes viales porque no se controla a los conductores alcoholizados...

-Sin duda, tiene que haber más controles, nosotros tenemos que articular más. Venimos muy bien en ese sentido. Estamos coordinando con los municipios para "dividirnos" un poco la jurisdicción del Gran Mendoza. Pero estoy totalmente de acuerdo, esto no funciona si los controles son escasos. Tampoco es toda nuestra responsabilidad: nosotros llegamos y teníamos tres alcoholímetros que no estaban homologados. Había nueve motos funcionando en la Vial. De un año a otro hemos bajado el veintipico por ciento los fallecimientos por accidentes y creo que si seguimos en esta senda como venimos, vamos a llegar a un 30% de bajas de muertes.

-Usted se refería a lo que encontraron cuando llegaron, ¿cuál fue el hallazgo en seguridad?

-Lo que nos encontramos en seguridad fue tremendo: 300 móviles andaban en toda la provincia, ¿Sabés lo que es cubrir toda la provincia con 300 móviles? Imposible.

-¿Qué opina de las críticas del peronismo, por ejemplo lo que refiere Fernández Sagasti?

-Yo creo que está dentro del marco del oportunismo electoral, nada más. Incluso en algunos aspectos hay contradicción, porque ella cuando votó lo que votó en el Senado nunca habló de "tolerancia cero".