Hace algunos meses, comenzó a circular un correo electrónico con una historia escalofriante, relacionada a un supuesto accidente y encubrimiento por parte de un camión de la firma La Serenísima.
El mismo está redactado por una supuesta periodista de diario Clarín y tiene una redacción que deja mucho que desear, lo cual hace que tenga poca probabilidad de certeza. Así reza el mail:
“Esta es información extraoficial, pero es real. Hace unos días en el entronque de la carretera de Cipo-Nqn un camión congelador de La Serenísima choca con el auto de una señora, esta tuvo la culpa pero sospechosamente el conductor del camión de la empresa La Serenísima se ofreció a pagar los daños con tal de que no llamara a peritos.
Pero la señora se niega porque alega que su auto tiene seguro y prefiere llamar a la policía de manera que el hombre sube a la camioneta y se suicida de un balazo en la cabeza.
La gente no se explica porque se suicido hasta que revisan el camión y descubren que en el interior del congelador había aproximadamente 10 cadáveres de niños sin ningún órgano.
Misteriosamente las autoridades no dieron parte a los medios de información, suponemos que no quieren causar pánico.
Ya hubo dos casos de dos niños que atendió un doctor por problemas no tan graves y murieron.
La coincidencia es de que a ambos al entregar el cuerpo tenían sus ojos vendados y se les dijo a sus parientes que no les quitaran las vendas de los ojos ¿que ocultaba ese doctor?
Si las enfermedades que presentaban los dos inocentes no tenían nada que ver con los ojos.
Este caso aún se está investigando porque ya se dio partea las autoridades.
Es alarmante pensar que uno de los niños muertos puede ser un conocido, por eso es que te suplicamos cuides de los tuyos, informales e informa también a toda la gente que conoces.
"Extrema precauciones con los niños", no los dejes solos.
No podemos saber si esos niños eran de Neuquén Roca Cipo etc que son más cercanos a los sitios donde se descubrieron estos camiones. No sabemos si la mafia de tráfico de órganos los vende aquí o en USA.
Usualmente acostumbramos eliminar este tipo de mensajes, no cuesta nada con darle un click en reenviar (forward), y hacérselo saber a toda la gente no dudes en comentar esta información.
Tal vez esto puede ayudar a salvar a un niño.
!!!!!!!!!!Gracias¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
Lic. María de Cristo Rocha Milenio
Diario Clarín
TEL.: 8150-5508 Ext.. 4671”
El referido correo electrónico ha llegado a la redacción de Tribuna de periodistas no menos de 100 veces, preguntando sus ocasionales remitentes acerca de la veracidad del mismo, como si fuéramos una suerte de “verificadores de información” de dudosa procedencia.
Agotados de tanto responder, decidimos encarar la indagación del caso. Lo primero que hicimos fue chequear los datos de la periodista, llamada María de Cristo Rocha Milenio. Jamás trabajó ni trabaja en Clarín.
Luego, comprobamos que el teléfono que aparecía como de la redacción de ese diario (8150-5508 Ext.. 4671) no existía en la Argentina.
Lo tercero que quedó por dilucidar fue el contenido de la información, lo cual fue hecho por un especialista del Instituto Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (INCUCAI), el más respetado de la Argentina en ese tipo de cuestiones.
“Desde ya que la cadena de mail es totalmente falsa, y viene circulando ya varios años, simplemente van modificando algunos datos según el país (ya había circulado por México y Colombia). Te envío unos párrafos con información institucional que te pueden servir para aclarar sobre el tema:
El INCUCAI informa que en nuestro país todas las actividades relacionadas con trasplante y donación de órganos están previstas por la Ley Nacional Nº 24.193 y son controladas y registradas por el Ministerio de Salud de la Nación, a través del INCUCAI. Esta ley establece que la donación en vida de un órgano para trasplante sólo puede ser realizada cuando exista entre donante y receptor un parentesco de hasta cuarto grado y sanciona
severamente cualquier contraprestación económica u otro beneficio por la dación de órganos o tejidos (art. 27 inc. f). En toda la historia jurídica de nuestro país no se registra ningún caso de comisión del delito de venta de órganos.
Es importante aclarar que en un operativo de procuración y trasplante de órganos participan entre 100 y 150 profesionales, y que solamente 5 de cada mil personas fallecidas pueden convertirse en donantes de órganos. Un operativo de procuración y trasplante requiere una infraestructura de complejidad tal y convoca a tantos profesionales que su
realización clandestina es imposible.
Para que una persona reciba un trasplante el médico que lo trata y le prescribe el trasplante debe inscribirlo en lista de espera y una vez inscripto esperar que se le designe un órgano. Existe una lista de espera única en todo el país para cada tipo de órgano, controlada y fiscalizada por el INCUCAI. La asignación de órganos y tejidos se hace exclusivamente en
base a criterios médicos objetivos: la urgencia según la gravedad del paciente, la compatibilidad entre donante y receptor, la oportunidad del trasplante, el tiempo en lista de espera y demás criterios médicos aceptados. Este sistema asegura la equidad en la distribución.
Por cualquier duda o consulta comunicarse a la línea telefónica gratuita del INCUCAI: 0800 555 4628, o ingresar a la página web www.incucai.gov.ar
Saludos cordiales”.
Elocuencia aparte.
Concluyendo
Largamente ha alertado Tribuna de periodistas acerca de la peligrosidad de hacer circular irresponsablemente este tipo de leyendas urbanas, especialmente en momentos en los que se hace fundamental incrementar la solidaridad social respecto a la donación de órganos.
En sentido similar, preocupa sobremanera cómo gran cantidad de personas creen a pies juntillas en historias tan inverosímiles como la descripta. Es un síntoma de la elocuente necesidad de fomentar dosis de pensamiento crítico en la actual sociedad.
Mientras eso no suceda, seguirán diseminándose leyendas de todo tipo, aún cuando sean imposiblemente descabelladas.
Christian Sanz