Este miércoles, sectores del kirchnerismo se reunirán en la Facultad de Derecho de la UBA, con el objetivo de discutir sobre la necesidad de una nueva Constitución. Contará con disertaciones del juez de la Corte Eugenio Zaffaroni, los constitucionalistas Eduardo Barcesat y Raúl Gustavo Ferreira y el filósofo Ricardo Forster.

En el Salón de Actos de la Facultad de Derecho de la UBA, se realizará una Mesa Redonda, abierta a toda la ciudadanía, en la que, según anticipó El Paralmentario, se comenzará a discutir “si es necesaria y posible una nueva Constitución en la Argentina”, tal como indica el comunicado difundido.

El debate está impulsado por un grupo de dirigentes políticos, sociales y sindicales, entre los que se cuentan Pedro Wasiejko, de la Federación de Trabajadores de la Industria y Afines (FETIA); Luis D’Elía, del Partido MILES; y Eduardo Sigal, referente del Frente Grande y presidente de la Fundación Acción para la Comunidad. Quienes propusieron la creación de una corriente de opinión desplegada por todo el país para impulsar el cambio constitucional.

Según el comunicado “no se trata de seguir haciéndole parches a una Constitución cuya matriz viene de 1853, ya que las transformaciones de nuestro país y el mundo nos desafían a pensar en un nuevo orden jurídico e institucional para que la Argentina esté a tono con los desafíos del siglo XXI”, afirma el texto.

“No prendemos cerrar nada. Dijimos que íbamos a abrir un debate, y en eso estamos empeñados. Algunos pensarán que queremos proponer la re-reelección. Somos conscientes de que puede haber miradas parciales. La nuestra quiere ser parte del desafío de este siglo, y los que proponemos este debate estamos dispuestos a firmar el compromiso de que no queremos ni aceptamos la re reelección”, adelantaron los organizadores.

Hace rato que Zaffaroni —muy amigo de Boudou— viene trabajando en el armado de un proyecto para la reforma e instauración del sistema parlamentario en reemplazo del presidencialista. Se especula con que la presentación del mismo acompañe su renuncia a la Corte, la cual el año pasado fue postergada en medio del escándalo por los departamentos a su nombre utilizados para ejercer la prostitución.

"Un gobierno parlamentario es fuerte siempre, porque tiene que tener mayoría en el parlamento para sostenerse. Y también tiene un sistema de controles más estricto", ha dicho varias veces el juez.

En febrero pasado, el vicepresidente Amado Boudou se había animado a deslizar "Que nos haya ido bien en ocho años nos alienta a creer que la Argentina puede seguir mejorando. Necesitamos cuatro años de medidas para seguir transformando la Argentina". Por supuesto antes de que el escándalo Ciccone irrumpiera en la agenda. Ahora, con la causa controlada y las aguas más calmas vuelve el debate por una “Cristina eterna”.

José María González