Parece que será un hecho nomás. Nadie lo confirma oficialmente, pero los trascendidos corren como reguero de pólvora.
En las próximas horas, según los corrillos del poder, sería desactivada la Unidad Especial de investigación del atentado a la AMIA. Es una de las versiones. La otra asegura que le quitarían rango de secretaría de Estado. Sea como fuere, Mario Cimadevilla quedaría fuera de juego.
No se trata de una interna política más, sino de la búsqueda de la verdad en torno al atentado más brutal que vivió la Argentina en toda su historia, cometido contra la AMIA.
En ese contexto, Cimadevilla libra una dura batalla contra Germán Garavano en el marco del juicio por encubrimiento al ataque contra la mutual israelita. Todo estalló después de que el ministro de Justicia decidiera retirar la acusación que pesaba contra los exfiscales Eamon Mullen y José Barbaccia, en un gesto que terminó de coronar la impunidad.
Las quejas de Cimadevilla y la intromisión de Elisa Carrió en la contienda, motivaron a Garavano a operar contra el titular de la Unidad AMIA. Ello explica la gran cantidad de artículos periodísticos —algunos de ellos en portales de dudosa procedencia— que mencionan que el macrismo está a punto de desmantelar ese organismo.
Por ahora, no hay nada oficial. De hecho, el propio Cimadevilla aún no tiene confirmación por parte del gobierno respecto de las versiones que circulan.
Más aún: según pudo saber este cronista, el titular de la Unidad AMIA consultó en las últimas horas con Mario Negri y este último fue tajante: “No se nada”.
En sentido similar, Elisa Carrió le contó a Cimadevilla que el 28 de febrero pasado le pidió a Mauricio Macri que lo “dejen trabajar tranquilo”. Evidentemente, no sirvió para demasiado.
Sea como fuere, es probable que en las próximas horas Garavano se corone como el gran ganador de la contienda.
Será una victoria pírrica, en la cual no solo habrá erosionado su propia imagen pública sino que habrá colaborado para que jamás tengan justicia las familias de 85 víctimas que murieron aquel 18 de julio de 1994 a las 9:53 de la mañana.
Ya está confirmada la desactivación de la Unidad de Investigaciones del Min. de Justicia, la llamada UEI. Que muchos confunden con la UFI AMIA del CHORRAZO SUICIDA Nisman, que depende de la Procuración de la Nación. Esta es una chambonada PRO en la manipulación de la justicia(son inútiles completos y no lo saben hacer), porque la acusación se va a sostener lo mismo y en el fallo del TOF2 no va a tener ninguna influencia ese descolgado intento encubridor de la banda encubridora integrada por Galeano, Mullen, Barbaccia, auxiliares de la Federal y SIDE y el sionista Beraja, por parte de la querella del "gobierno". Los fiscales del caso y todos las otras querellas(excepto la de los sionistas de la AMIA/DAIA) van a mantener la acusación y todos estos encubridores van derechito a condenas seguras. La UEI fue creada en 2000 por el aburrido de la Rúa, para que "colaborara en la "investigación"(lease: encubrimiento) del bombazo AMIA", y su primera jefa fue la Nilda Garré. A la que en 2001 echaron porque se puso de punta con los sionistas de la DAIA. La siguió Roa como jefe al que también rajaron en 2015 porque se quiso tirar contra el gobierno de Israel, por el tema del fiscal trucho israelí que entrevistó "en secreto" a Telleldin en 1995. A partir de ahí fue prácticamente desactivada en el accionar(no en los empleados que siguieron rascándose a 2 manos y cobrando sus suculentos sueldos que les pagamos la gilada contribuyente). La reactivaron los CORRUPTOS Y CIPAYOS PRO para ponerla al servicio de sus amos sionistas de extrema derecha y "buitres" yankis, para los que encubrieron los encubridores bajo juzgamiento ahora, pero por un cortocircuito con el "aliado" radicha, Cimadevilla, ahora directamente la han hecho desaparecer.