Un examen para cubrir una vacante judicial en Comodoro Py y una notebook con el examen ya “pre cargado”, impulsaron el que promete ser el escándalo del momento en el Consejo de la Magistratura.

Todo explotó este jueves en el marco de la prueba de oposición que se tomó para ocupar la vacante del juzgado Federal Nº 12 de Comodoro Py, que supo ocupar Sergio Torres. Allí, no casualmente, reposan algunas de las causas judiciales más sensibles a los intereses de la política vernácula, algunas de ellas relacionadas al mundo narco.

Como sea, allí mismo, cuando se llevaba adelante la evaluación en cuestión, se detectó que una de las computadoras que estaban en el lugar y que se utilizó para el examen, tenía información concreta sobre la evaluación de marras. Una suerte de "machete" que buscó beneficiar a alguno de los postulantes.

Ello provocó la furia de puntuales consejeros, que impulsaron la apertura de un sumario para que se investigue lo sucedido. Los que lograron la aprobación del “expediente” fueron Graciela Camaño y Diego Molea, quienes posaron sus miradas sobre José Francisco Elorza, responsable de la Comisión de Selección del Consejo, ya sospechado por hechos similares de antaño.

En realidad, todo trascendió en la sede de la Oficina de Subastas Judiciales de la Corte Suprema de Justicia, sita en Jean Jaurés 545, de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

“A Elorza le fueron con los tapones de punta, ya le iniciaron un sumario interno, imaginate que se trata del juzgado más importante de Comodoro Py por los temas que tiene en tratamiento”, dijo una fuente del Consejo de la Magistratura a Tribuna de Periodistas en estricto off the record.

Es que, por la dimensión del escándalo, la trama se intenta mantener en reserva en estas horas. Ni siquiera los denunciantes se han animado a hablar sobre este tema. No al menos por ahora.

Como se dijo, Elorza ya vivió un escándalo similar a mediados de mayo de este año, luego de que Camaño y Molea denunciaran una serie de irregularidades en concursos para elegir jueces, entre ellos uno que intervendría en la causa del Correo Argentino. Entonces, se pidió la remoción del funcionario judicial ahora cuestionado.

En esos días, Elorza logró zafar. Ahora, difícilmente lo haga.