La indagación que lleva adelante la Justicia para intentar determinar el origen y destino de la valija ingresada por el venezolano Guido Antonini Wilson, se encuentra en estos días en vía muerta. Según publica hoy diario La Nación, “sin testigos que aporten información relevante, ni documentos que revitalicen la pesquisa abierta en agosto de 2007, el juez en lo Penal Económico, Daniel Petrone, reiteró esta semana sus reclamos a los gobiernos de Estados Unidos y Venezuela para que le entreguen lo que evitaron darle durante los últimos tres años y medio: al propio Antonini y a sus entonces amigos venezolanos, Diego y Daniel Uzcátegui”.
Petrone también habría solicitado documentos específicos a ambos países para tratar de darle nuevos bríos a la causa, en la que Antonini y los Uzcátegui fueron declarados prófugos, mientras que el entonces funcionario del Ministerio de Planificación Federal, Claudio Uberti, sobrelleva una falta de mérito para sobreseerlo o procesarlo.
“La fiscalía que conduce María Luz Rivas Diez, en tanto, apunta a acusar a Uberti. Si no como presunto dueño de los dólares de la valija, por lo menos como supuesto encubridor de Antonini Wilson”, según reconstruyó La Nacion de fuentes con acceso al expediente, aunque ese "esfuerzo" resultaría "complejo", anticipan esos mismos informantes.
Además de la extradición de Antonini y los Uzcátegui, Petrone reclamaría al Departamento de Justicia estadounidense que le entregue los audios que grabó la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) y se difundieron durante el juicio en Miami para incorporarlos a la causa.
“Hasta ahora, Washington sólo le envió las transcripciones de esos audios, pero uno de los protagonistas de esas grabaciones, el argentino Guillermo Ledesma —que discutió en Fort Lauderdale con Antonini ser su abogado— dijo no recordar si en efecto él había dicho lo que aparecía en su boca en esas transcripciones”, asegura el referido diario.
Desde Venezuela, en tanto, la negativa es aún más cerrada. El gobierno de Hugo Chávez ni siquiera acusó recibo de los exhortos que la Justicia local le envió en diciembre de 2007, en abril, junio, julio y octubre de 2008, y otra vez en octubre de 2010.
La falta de respuestas desde Caracas empujó a Petrone a reclamarle a la Cancillería argentina que buscara determinar, por lo menos, si en Venezuela "se iniciaron actuaciones para el enjuiciamiento" de los Uzcátegui sobre "los hechos aquí investigados".
¿Habrá que cruzar los dedos para que haya un mínimo avance hacia la verdad?
Equipo de Política de Tribuna de Periodistas